En el paso de la alegoría, Emilio Pizarro talló a Dios-Hijo en 1913; Dios-Padre es una escultura anónima del XVII; Dios-Espíritu Santo es obra de José Antonio Bravo. Miguel González es el autor de la iglesia dormida en 1939; el ángel y el dragón son obras de Ángel Rodríguez Magaña, de 1907; el arcángel es de autor desconocido; Dubé de Luque talló a San Gregorio en 1994, San Ambrosio en 1995, San Agustín y la Fe en 1996 y a San Jerónimo en 1997. Luis Álvarez Duarte talló el crucificado en 2002. La Virgen de la Concepción es obra de Bidón, de 1958. Una de las Marías es de Manuel Flichi, de 1917. Nicodemo es de Dubé de Luque, de 1998. Las restantes figuras de este segundo paso son de Ángel Rodríguez Magaña, de entre 1919 y 1924. Juan Astorga esculpió la esperanza en 1820