Los restos romanos de la Fábrica de Artillería de Sevilla serán visitables

Un importante atractivo para la visita. Los restos romanos hallados durante las obras de rehabilitación de la Fábrica de Artillería serán visitables. Para ello se construirá una cripta arqueológica bajo el Patio de Crisoles y la Nave de Fundición. La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico ha autorizado ya este proyecto que persiguen dar a conocer y resaltar estas estructuras que parece que pertenecen a una instalación residencial y productiva rural de situada extramuros de la ciudad, un claro antecedente de lo que sería la zona de la Buhaira durante la etapa de dominación islámica.

Los restos parece que pertenecieron a una instalación residencial y productiva rural de época romana, es decir, una uilla. Estaba situada extramuros de la ciudad y en la margen derecha del río Tagarete. Las estructuras descubiertas presentan un estado de conservación desigual. Se despliegan a cotas relativamente superficiales y próximas a los pavimentos modernos del Patio de Crisoles, apreciándose su interrupción a partir de una determinada profundidad, al haber sido arrasadas por la construcción de la propia fábrica durante el siglo XVIII. Se encuentran parcialmente transformadas por reformas de distintas épocas.

En la actualidad, como medida de seguridad en la obra, en en coordinación con el responsable del control arqueológico, los restos se han documentado y protegido y se ha acotado el área afectada, quedando preservada de manera transitoria hasta su posterior investigación. Estos hallazgos se extienden en una superficie aproximada de 850 m2.

Entre los restos documentados destacan una piscina localizada en la mitad oriental del Patio de Crisoles, con unas dimensiones de 11 metros de largo, 3,2 metros de ancho y 1,7 metros de profundidad. "Presenta un revestimiento de opus signinum, con media caña en todo el perímetro del fondo y dos escaleras situadas en esquinas opuestas. Esta estructura hidráulica se asocia a una serie de pavimentos de opus signinum que dan paso a una gran estancia de la que conocemos parte de un mosaico geométrico. Esta habitación se desarrolla en la Nave de Fundición", señala el proyecto de la Gerencia de Urbanismo.

En el lado opuesto, en el Patio de Crisoles, se han registrado hasta dos fases de estructuras de ladrillo relacionadas con pavimentos de opus signinum que se interpretaría con actividades productivas de la uilla, aunque sigue pendiente de una investigación más precisa. Al oeste del mosaico se han documentado hasta cuatro alineaciones paralelas norte-sur. En este caso no se conservan pavimentos pero hacia el centro de la Nave de Fundición se registran restos de infraestructuras relacionadas con hornos.

"El hallazgo de los restos romanos es de gran interés por cuanto son la evidencia más clara de la existencia de uillae periurbanas de la ciudad de Híspalis. La catalogación de la Fábrica de Artillería como BIC, así como su futuro uso cultural suponen el marco ideal para rescatar los restos romanos. Es intención de la propuesta facilitar la comprensión de la villa mediante la presentación de sus restos arqueológicos más significativos y mejor conservados (ámbito de la unidad piscina o natatio y otras estructuras hidráulicas -opus signinum- relacionadas, estancias pavimentadas con mosaicos, tumba, etcétera).

Trabajos de conservación de los restos arqueológicos

Primera fase de protección. Se ha procedido ya a la documentación y protección de los restos arqueológicos, así como a la acotación del área afectada, quedando debidamente protegida. "Tras la preconsolidación y protección de elementos puntuales, se ha llevado a cabo la cubrición de los restos con malla geotextil, capa de arena lavada y capa de albero".

Primera fase de conservación. Se procederá a la retirada de las capas de protección y se realizarán estrictamente actuaciones preventivas de limpieza, consolidación y conservación de los restos arqueológicos que garanticen su preservación, quedando para una fase posterior y final las labores de restauración definitivas. "Se efectuarán los oportunos ensayos y análisis para definir mejor la composición de las fábricas existentes, así como las características de los tratamientos a aplicar de forma que se garantice su calidad, resistencia al medio y compatibilidad con los materiales originales. Como criterio general en los trabajos se basará en una intervención mínima al objeto de preservar el valor inequívoco del resto original. Se propone la estricta consolidación de las estructuras halladas evitando en lo posible restituciones, salvo en el caso de ser necesarias para garantizar su estabilidad estructural o evitar su pérdida".

Los trabajos contarán con la supervisión del equipo de restauración adscrito a las obras de rehabilitación.

La presentación de los restos: una cripta arqueológica

La conservación y presentación de los restos romanos ha de ser compatible con la preservación de la Fábrica de Artillería. Con este objetivo, se propone la construcción de una cripta arqueológica visitable situada bajo las rasantes del Patio de Crisoles y Nave de Fundición. La solución estructural propuesta ha de garantizar, por tanto, la accesibilidad y visita al yacimiento y la restitución de los niveles de suelo modernos de la construcción. Con este objetivo, se propone la ejecución de un sistema estructural que suponga una incidencia mínima sobre el yacimiento.

"Las soluciones adoptadas para los distintos elementos que conforman la estructura y la cimentación de la cripta subterránea se han proyectado de modo que sean compatibles y respetuosas con los restos arqueológicos. Todas las soluciones han sido compartidas y supervisadas por el arqueólogo responsable de esta intervención, Álvaro Jiménez Sancho".

El forjado ideado busca cubrir tres objetivos: salvaguardar la funcionalidad necesaria de ser el nuevo suelo de una parte notable del Patio de Crisoles y la Nave de Fundición, salvar la mayor luz posible empleando un forjado que no haya que encofrar y resolver las cargas que se ha de soportar.

El espacio resultante, de unos 600 m2 de superficie, dispondrá de una altura libre general de 2,20 metros que se ajusta puntualmente a 2 metros. La cripta organizará dos ámbitos enlazados, diferenciados por el muro meridional de la Nave de Fundición: el situado bajo el Patio de Crisoles, que se corresponde con los espacios exteriores situados en torno a la piscina y, por otro, el situado bajo la Nave de Fundición, donde están las estancias interiores de la villa, alguna pavimentada con mosaicos.

La cripta será accesible directamente desde el exterior a través de la escalera situada en el extremo oriental del Patio de Crisoles, ya contemplada en el proyecto de ejecución y utilizada como vía de evacuación del antiguo sótano de instalaciones. También será accesible desde un nuevo ascensor situado en la Nave de Fundición, que posibilitará no sólo la visita a la nueva cripta arqueológica sino también a las cubiertas del complejo, enriqueciendo la oferta cultural de la Fábrica de Artillería. Se propone un ascensor de acero y vidrio, transparente y de aspecto ligero, guardando cierta analogía con la torre de la chimenea de ladrillo situada en el extremo opuesto de la nave de Fundición.

"En los ámbitos inmediatos a ascensor y escaleras se proyectan espacios vestibulares o de acogida con elementos informativos sobre el yacimiento. De estos espacios partirán sendas o pasarelas transversales que posibiliten el acercamiento del visitante a los restos arqueológicos. La estructura recibirá un tratamiento neutro para evitar destacar frente a los restos conservados de la villa. La iluminación natural del espacio bajo el Patio de Crisoles se confía a la disposición de tres lucernarios alineados con la piscina romana. En la Nave de Fundición se propone otro lucernario, centrado sobre la zona de mosaicos, lo que permitirá su visión parcial desde el nivel superior".

“Se trata de un trabajo científico y riguroso para acometer la preservación, conservación, integración y puesta en valor de estos restos arqueológicos, donde han trabajado conjuntamente los arquitectos Francisco Reina y Eduardo Martínez y el arqueólogo Álvaro Jiménez Sancho, coordinados por el jefe del Servicio de Sostenibilidad e Innovación Urbana de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sevilla y responsable y coordinador general del proyecto para el futuro centro de industrias culturales y creativas, Javier Huesa. Se ha trabajado desde un escrupuloso respeto hacia el yacimiento proyectando una nueva cripta arqueológica visitable que enriquecerá patrimonialmente el propio Centro Magallanes. Un ejemplo más del compromiso, traducido en inversiones, del gobierno municipal por la rehabilitación y puesta en valor de nuestro patrimonio”, ha destacado Juan Manuel Flores, delegado de Hábitat Urbano y Cohesión Social.