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De Velázquez a Zurbarán: así es el espectacular museo de la parroquia de la Magdalena de Sevilla

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Así es el espectacular museo de la parroquia de la Magdalena de Sevilla / Alberto Costas

Un testimonio de la fe a través de una selección de obras de diversa naturaleza, cronología y función y de autores muy importantes. Velázquez, Zurbarán, Pacheco, Gijón... son algunos de los destacadísimos artistas que han dejado su legado en la Parroquia de la Magdalena y ahora estas obras están disponibles para la contemplación de todos en el nuevo espacio museístico que el templo ha habilitado en su coro alto, un espacio que por sí mismo y por la visión que ofrece el templo dominico ya merece una visita. El arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz, ha inaugura y bendice este viernes el nuevo espacio expositivo. Desde este sábado se organizarán visitas guiadas y gratuitas al museo y, desde final de mes, el espacio será incluido en el recorrido cultural del templo.

El arzobispo durante la bendición del espacio museístico. / Emilio Saenz

La parroquia de la Magdalena es uno de las iglesias más históricas de Sevilla. El próximo año se cumplirán 300 años de la consagración del actual edificio barroco que formó parte del convento de San Pablo de la orden de Predicadores. De este cenobio era fraile Bartolomé de la Casas y en él fue ordenado obispo de Chiapas en 1546. Pero si su historia es importante, su patrimonio no le va a la zaga. El templo fue proyectado por Leonardo de Figueroa y atesora importantes obras de arte, empezando por las pinturas murales que están siendo recuperadas. Monseñor Saiz, además de inaugurar el espacio museístico, ha bendecido los trabajos de restauración de la decoración de la nave del Evangelio, que proseguirán tras el Corpus, el 19 de junio. El último tesoro de la Magdalena, es la Inmaculada con el Niño que donó una feligresa y que el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH) a través del historiador Gabriel Ferreras ha atribuido a un joven Diego Velázquez. Esta es una de las piezas centrales del espacio museístico.

El espacio central del museo. / Carmen Castellano

En los últimos diez años, la Magdalena, gracias al tesón de su párroco, Francisco Román, y a la colaboración de feligreses y muchos ciudadanos anónimos, ha restaurado y recuperado diversos espacios. Se han invertido casi 1,5 millones en estas tareas. Uno de estas zonas singulares es el coro alto, que cuenta con unas muy interesantes yeserías y pinturas, y que acoge este museo. En su día contaba con una sillería barroca muy destacada que en 1903 fue trasladada al convento dominico de Almagro. Allí se conserva y se ha escaneado para realizar una reproducción a escala 1:20 que será una de las primeras piezas que pueda ver el visitante.

El arzobispo durante la bendición del espacio museístico. / Emilio Saenz

Pero para llegar a la zona central del coro, hay que pasar primero por la capilla bautismal que conserva la pila en la que fue bautizado Bartolomé Esteban Murillo, uno de los hijos ilustres de la Magdalena. Tras subir la escalera se llega a la nave de la epístola del coro. Allí se hay diversos objetos y una gran línea de tiempo en la que muestra visualmente los principales acontecimientos vinculados a la parroquia, el convento y a la historia cristiana de la ciudad. Un vídeo con los principales hitos realizados durante la última década también da la bienvenida al visitante.

Los tres Zurbaranes expuestos. / Carmen Castellano

De este lugar se pasa al espacio principal del coro alto. Un elenco de piezas de singular valor artístico se muestran de manera destacada. Entre ellas, obras pictóricas de Zurbarán, Francisco Pacheco y Sebastián de Llanos Valdés, con especial mención a la pintura de la Inmaculada con el Niño, recientemente restaurada y atribuida a Diego Velázquez. Igualmente, destacadas son las actuaciones de conservación y restauración de la pareja de lienzos que representan el nacimiento y el bautismo de Santo Domingo, una rara iconografía que ahora se muestra en todo su esplendor. La escultura del santo, atribuida a Pedro Roldán, está también representada en la muestra como pieza destacadas, así como la talla de San Clemente Papa, de Francisco Antonio Gijón, un crucificado de marfil procedente de Filipinas, o la imagen alegórica de la Fe.

El arzobispo bendice la restauración de las pinturas murales. / Emilio Saenz

Para formar parte de este proyecto expositivo algunas de estas piezas han sido sometidas a procesos de conservación y restauración. Es el caso del cristo de marfil o la imagen de Santo Domingo, titular de la Venerable Orden Tercera de Santo Domingo, y que originalmente ocupó el retablo en que actualmente reciben culto los titulares de la Hermandad del Calvario.

La Inmaculada con el Niño atribuida a Velázquez. / Carmen Castellano

En la muestra, se presentan toda una serie de elementos de orfebrería, muchos de los cuales proceden de la Hermandad Sacramental: desde vasos sagrados a diversos objetos litúrgicos, muchos de ellos de gran interés artístico y que permanecen en uso actualmente.

Un momento de la celebración desde el coro alto. / Emilio Saenz

En el espacio central también hay una vitrina destacada para mostrar el rico patrimonio documental que atesora el Archivo Histórico Parroquial, que comprende además del de la de Santa María Magdalena, el de la extinta parroquia de San Miguel Arcángel, tiene una importante presencia en el proyecto expositivo. En este primer momento se ha optado por enseñar documento relacionados con la pintura. De los muchos testimonios que se almacenan en sus documentos, se exponen algunas páginas de libros parroquiales donde aparecen reflejados feligreses ilustres como el nacimiento de Bartolomé Esteban Murillo, el entierro de Francisco Pacheco, el matrimonio de Francisco de Zurbarán o el matrimonio de Diego Velázquez.

Diversos enseres. / Carmen Castellano

Para contemplar el templo cómodamente desde esta privilegiada altura se ha instalado un graderío en el espacio central del coro alto.

Elementos litúrgicos curiosos

En la nave del Evangelio se muestran las llamadas "piedras vivas de la Magdalena" están también presentes en el proyecto expositivo del coro alto. Los objetos litúrgicos y otros enseres destinados a la administración de los sacramentos vienen a representar a muchas generaciones de feligreses cuya salud espiritual fue atendida por el clero parroquial a lo largo de los siglos. Sacerdotes cuyo testimonio queda recogido a través de los cálices que utilizaron, algunos de los cuales forman parte del conjunto de piezas expuesta. Especialmente curiosos resultan el arca eucarística del monumento del Jueves Santo, que por su propia naturaleza y función rara vez puede ser contemplada como ahora, o el libro manifestador, que se usaba para colocar el Santísimo Sacramento en los domicilios de los enfermos e impedidos a los que se llevaba la comunión.

El libro-ostensorio para llevar el Santísimo a los enfermos / Carmen Castellano

La museografía ha sido diseñada por el arquitecto Juan Pablo Rodríguez Frade, un destacado especialista en la materia; y la selección de piezas ha corrido a cargo del párroco, Francisco Román Castro, y del historiador del arte Pedro Martínez Lara. Muchos de los elementos que se muestran irán rotando, puesto que mantienen su función litúrgica y son utilizados en las distintas celebraciones. El párroco destaca el reto que supone mantener la actividad principal del templo, que es el culto; y esta actividad cultural. Por ello, las visitas serán principalmente entre semana, para no interferir en la actividad de la parroquia.

"Hoy es un día muy importante para nosotros. Inauguramos este proyecto que pensamos desde hace mucho tiempo. Es una alegría poder contemplar estas piezas artísticas a través de las cuales la Iglesia muestra la gloria de Dios. Son elementos que tradicionalmente no se exponen, muchos de los cuales han sido restaurados para la ocasión", ha subrayado el párroco.

Por su parte, el arquitecto responsable del proyecto ha ensalzado la complicación que ha supuesto esta intervención: "Era un reto hacer un espacio museográfico en una parroquia. Adecuar el coro alto para ello y que las piezas dialoguen unas con otras. Hemos creado una espacie de sillería perimetral para ello. Y hemos buscado un equilibrio entre lo que se expone, cómo se expone y lo que queremos contar".

Visitas guiadas gratuitas

Enseres expuestos en el museo. / Carmen Castellano

Durante las próximas dos semanas habrá unas jornadas de puertas abiertas para que los feligreses y todas las personas que lo deseen puedan conocer el nuevo museo. Esta iniciativa quiere ser un reconocimiento a todos aquellos que han colaborado en la ejecución de este ambicioso proyecto, financiado íntegramente con fondos privados. En la web de la parroquia (rpmagdalena.org) estarán recogidos, de manera actualizada, los días y horarios en que será posible participar de esta iniciativa, siendo imprescindible inscribirse en el email visitas@rpmagdalena.org.

Se trata de visitas guiadas y gratuitas de unas 20 personas. Los días inicialmente establecidos son:

Una vez finalizado este periodo, el coro alto se podrá recorrer como un espacio más dentro de la visita habitual que se realiza al templo.

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