Las cuentas andaluzas tenían, a fecha de 31 de octubre, un balance positivo de 2.589 millones de euros, un 1,60% del PIB regional. La cantidad triplica con creces el superávit que la comunidad presentó justo un año antes, cuando Andalucía contaba con 688 millones a su favor en la cuenta de ingresos y gastos. El aumento de las transmisiones de la Administración central y el buen comportamiento de la recaudación fiscal lleva a Andalucía a ser la región con un superávit más abultado en términos absolutos y la quinta en términos relativos. Sólo las dos comunidades forales –Navarra (1,66%) y País Vasco (1,72%)–, Canarias (3,96%) y Asturias (2,07%) tienen un balance positivo mayor en relación a su PIB a estas fechas del año. La media de las comunidades está en el 1,02% del PIB y sólo Murcia presenta un balance negativo, con el -0,16%.

Noviembre y octubre son dos meses en los que se ejecutan cantidades abultadas, por lo que la lógica dice que la cantidad al final de 2021 será menor. Sirve como ejemplo el pasado ejercicio, cuando se pasó de un superávit de 688 millones a uno de 206, un 0,1% del PIBregional. Desde la Consejería de Hacienda y Financiación Europea además matizan el dato, ya que aseguran que en los ingresos que computa el Gobierno central están los 1.100 millones de ayudas a empresas para atajar las consecuencias de la pandemia y “1.800 millones” asignados de los fondos de recuperación.

El departamento que dirige Juan Bravo señala que deberán devolver la parte de las subvenciones para empresas que no se ejecuten, mientras que si ocurre lo mismo con el dinero de Bruselas, se puede trasladar a 2022, rechazando así las críticas del delegado del Gobierno, Pedro Fernández, que afeó al Gobierno andaluz el martes que presente semejante superávit al mismo tiempo que deja de contar con 8.000 profesionales sanitarios contratados para refuerzo contra la pandemia.

Más allá de la disputa política, el dato resulta llamativo y está empujado por el aumento de las transferencias de fondos estatales y europeos (17,3% más), que lleva a los recursos a crecer un 16,8% respecto a octubre de 2020. Los gastos también crecen, pero de forma más limitada (6,9%) y empujados sobre todo por el aumento de las remuneraciones a los trabajadores públicos (7,1% más), hasta suponer más de la mitad del gasto de la Junta en los primeros 10 meses del año.

El Ministerio de Hacienda y Función Pública también ha difundido recientemente los datos de gasto sanitario entre enero y octubre de este año. Andalucía también encabeza la clasificación en términos absolutos, con 1.023 millones de euros, según el dato facilitado por el propio Gobierno de la Junta. Esta cantidad supone el 0,63% del PIB andaluz, muy por encima de la media del resto de las comunidades (0,47%) y sólo superada por Castilla-La Mancha (0,74%) y Murcia (0,72%). El gasto de la Administración andaluza para hacer frente a la pandemia es el 18% del total dedicado por las comunidades autónomas para atajar la crisis del Covid-19, 5.676 millones hasta octubre de 2021.

El pasado año por las mismas fechas, el esfuerzo presupuestario del Gobierno andaluz para paliar las consecuencias de la pandemia era menor. Concretamente, 718 millones de euros, el 11,7% del total autonómico y un el 0,49% del PIB andaluz. La cantidad dedicada en el año vigente es mayor tanto en términos absolutos como relativos, mientras que la media de las regiones ha experimentado un descenso al pasar del 0,55% del PIB de las comunidades en octubre de 2020 al 0,47% del que Hacienda informa este año.