La ventana
Luis Carlos Peris
Perdidos por la ruta de los belenes
El Ayuntamiento y el Arzobispado están punto de cerrar un nuevo convenio para la rehabilitación de la iglesia y la sacristía del convento de Santa Clara. Tras incumplir el Consistorio el acuerdo firmado en el año 2001 entre el entonces delegado de Urbanismo, Rafael Carmona; y el recordado vicario general, Antonio Domínguez Valverde, por el que la Archidiócesis cedía la titularidad del cenobio, salvo la iglesia y la sacristía, a cambio de su restauración integral, los equipos del alcalde Juan Espadas y el arzobispo Juan José Asenjo están a punto de rubricar una nuevo convenio que permitirá, por fin, la intervención en una de las mayores joyas patrimoniales de la ciudad. El acuerdo contempla que sea el propio Arzobispado el que acometa las actuaciones, aunque serán sufragadas por el Consistorio mediante un plan de inversiones plurianual. El coste de la rehabilitación de la iglesia y sus dependencias anejas es de tres millones de euros.
Desde que el convento de Santa Clara pasó a manos municipales las distintas corporaciones, primero con Sánchez Monteseirín, posteriormente con Juan Ignacio Zoido, y ahora con Juan Espadas a la cabeza, han invertido alrededor de ocho millones de euros en su rehabilitación. Estas intervenciones siempre se han centrado en las zonas sobre las que el Consistorio tiene el uso, como el claustro, los refectorios o los dormitorios de las monjas, pero no se han destinado recursos para restaurar y volver a abrir las zonas que permanecieron en manos de la Iglesia y sobre las que existía un compromiso firmado para su arreglo. Desde hace meses, hay muy buena disposición y entendimiento entre el Ayuntamiento y el Arzobispado para revertir este hecho y que se acomete la recuperación de la iglesia, un auténtico tesoro con obras maestras de Martínez Montañés.
El nuevo convenio será una realidad muy próximamente y es intención que la primera partida de dinero se transfiera antes de la finalización de este mandato para que las obras puedan arrancar lo antes posible. El Ayuntamiento destinará alrededor de tres millones de euros a devolverle todo el esplendor a la iglesia de Santa Clara. Esta importante suma de dinero se repartiría en varios presupuestos, ya que la obra también se haría entre dos y tres años. El acuerdo está tan próximo a rubricarse que la intervención municipal ya lo estaría estudiando para incluir una partida en los próximos presupuestos.
Cargos importantes del Arzobispado han visitado recientemente la iglesia del convento y aseguraron que su estado no es tan ruinoso como se pudiera pensar. La Archidiócesis, además, tiene instalados en el edificio un sistema de alarmas para garantizar la seguridad del recinto. El estado de las obras de arte, la mayoría de ellas depositadas en el Casa Sacerdotal e la calle Becas, tampoco es malo. De hecho, el programa competo del retablo se podrá ver en la exposición sobre Martínez Montañés que se celebrará en otoño en Alcalá la Real.
El proyecto de rehabilitación para volver a abrir el templo sería encargado por el propio Arzobispo que se encargaría de llevar a cabo todo el proceso con sus propios técnicos. Una vez que la rehabilitación se ponga en marcha, el Arzobispado debe aclarar el uso al que dedica este templo, que se encuentra en un barrio, como el de San Lorenzo, que cuenta con numerosas y muy concurridas iglesias, como la propia parroquia o la basílica del Gran Poder. El proyecto originario ya no es viable porque planteaba incluso que una nueva comunidad de religiosas ocupara el inmueble. La falta de vocaciones, entre otros motivos, descartan este fin. La intención actual es que la iglesia una vez reabierta tenga un importante uso sacramental, con la exposición del santísimo, actividades para atraer a los jóvenes y para la difusión de la cultura y el patrimonio religioso.
Esta nueva fórmula de colaboración entre la Iglesia de Sevilla y el Ayuntamiento permitiría también que se acometan de manera simultánea las obras en la iglesia y que el Ayuntamiento siguiera invirtiendo otras cantidades de dinero en rehabilitar las zonas que tiene en uso del antiguo cenobio y que se destinarán, por ejemplo, a acoger las obras donadas esta misma semana por Luis Gordillo a la ciudad. Buena parte de los fondos que se destinan a estos trabajos proceden del incremento de dos euros aplicado a las entradas del Real Alcázar, que también se dedican a poner a punto la Real Fábrica de Artillería.
Para seguir invirtiendo en el convento, en este caso, en la Torre de Don Fadrique, situada en la zona de los jardines, el Ayuntamiento ha vuelto a presentar un proyecto para acogerse al programa del 1,5% Cultural del ministerio de Fomento del Gobierno de España. El coste de la restauración de la torres es de, aproximadamente, un millón de euros. Un 45% sería sufragado por el Estado y el resto por la Gerencia de Urbanismo.
El Ayuntamiento también pondrá en marcha próximamente la adecuación de la entrada histórica al cenobio por la calle Santa Clara. La Comisión Provincial de Patrimonio ha aprobado esta semana esta intervención que tiene un coste de 150.000 euros. Los trabajos consistirán en habilitar el recorrido que conecta la portada que da acceso al bello compás y a la iglesia con los jardines y la Torre de Don Fadrique, donde se realizan espectáculos.
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