Finaliza la restauración de las columnas de la Alameda de Hércules

Las columnas de las Alameda de Hércules han recuperado todo su esplendor tras más de dos meses en restauración. La Gerencia de Urbanismo ha culminado con éxito el proceso que se inició hace dos años, cuando se llevó a cabo una limpieza de los dos grupos de columnas, así como de sus esculturas y pedestales, a los que se aplicó también un tratamiento de protección especial con hidrofugante. Sin embargo, entonces no se pudo intervenir ni en los fustes ni en la propia piedra. Ahora, la empresa especializada Benza Conservación y Restauración ha llevado a cabo un tratamiento profundo de mantenimiento en las cuatro columnas que ha permitido completar la actuación. Como culminación a este proceso, el Ayuntamiento invertirá 56.000 euros en la reposición de las rejas de protección, eliminadas en el año 2007.

La intervención, realizada con cargo al contrato de mantenimiento de los monumentos públicos, ha consistido en una limpieza mecánica y química completa de todos los elementos -incluidas nuevamente las esculturas-, y en la aplicación de tratamientos biocidas, y de consolidación y protección con hidrofugante nanotecnológico. Asimismo, se han sellado todas las fisuras y oquedades que se habían ido formando y se han resuelto las patologías posibles detectadas durante los trabajos, como el rejuntado de llagas y la eliminación de costras mediante la proyección de microesferas de vidrio. Una vez concluida la actuación, que dio comienzo el pasado 4 de mayo en los monumentos del extremo sur, esta misma semana se desmontarán los andamios que recubren las columnas del lado norte.

"Con la finalización de estos trabajos integrales de conservación se garantiza de nuevo el mantenimiento en adecuadas condiciones de estos monumentos, que tanto por su antigüedad como por su exposición continua a los agentes medioambientales sufren progresivos deterioros, agudizados por la acción de la humedad. Atajarlos antes de que deriven en patologías más graves, resulta clave", ha resaltado el Ayuntamiento.

Una intervención de esta envergadura no se realizaba en las columnas de la Alameda al menos desde el año 1996, en el que se acometió un proyecto de restauración de las situadas al sur del paseo.

Recuperación de las rejas

Como complemento, la Gerencia de Urbanismo tiene previsto desarrollar próximamente un proyecto de intervención específico para recuperar las verjas de hierro que protegían las columnas desde 1876 a 2007. Las nuevas protecciones que se construyan serán de aspecto idéntico a las instaladas en el siglo XIX si bien, respectando la normativa vigente en materia de seguridad, se realizarán con materiales actuales y respondiendo a condiciones y necesidades del momento. De este modo, tanto los pilares como los barrotes serán de acero y los elementos decorativos de fundición.

En cuanto a los detalles constructivos, cada una de las verjas que rodearán a las columnas estará formada por cuatro paños de 2,07 metros de altura por 3,05 metros de ancho, unidos por pilares tubulares de acero. Éstos, a su vez, estarán compuestos por barrotes de acero redondos y macizos de 22 mm de diámetro, terminados en punta de lanza con acabado romo y con elementos decorativos de fundición en sus extremos. La separación entre barrotes no será mayor de 10 centímetros, según exige la normativa actual. Para el acceso al espacio interior, se construirá una puerta en uno de los paños.

Por otro lado, con el fin de obstaculizar el acceso de perros a la base de las columnas, se reforzará la parte inferior de la reja, añadiendo un barrote intermedio de acero macizo en una altura de 52 centímetros, que se intercalará con los barrotes de mayor tamaño.

Para evitar la oxidación de todos los elementos metálicos se proyecta el galvanizado en caliente de los paños de rejas y de los pilares tubulares a los cuales irán atornillados. Sobre esta terminación se aplicará una imprimación sintética antioxidante de secado rápido y dos manos de esmalte sintético a base de resinas acídicas acabado forja mate.

El proyecto ya cuenta con el informe favorable de la Comisión Local de Patrimonio Histórico, de manera que Urbanismo puede iniciar ya el proceso de licitación para la contratación de los trabajos, que han sido valorados en algo más de 56.000 euros.

"Con estas intervenciones sobre estas parejas de esbeltas columnas conmemorativas, la Gerencia de Urbanismo garantiza la plena recuperación de estos conjuntos monumentos, así como asegura su conservación y adecuado mantenimiento en los próximos años".

Intervenciones en otros monumentos

No sólo las columnas de la Alameda son objeto de tareas de conservación por parte de la Gerencia de Urbanismo en estos momentos. Hace sólo unas semanas se ha actuado de urgencia en el mural Verbo América, en la Isla de la Cartuja junto al Puente de la Barqueta, en la Cruz de la Cerrajería, en el barrio de Santa Cruz y, esta misma semana comenzará trabajos de mantenimiento en el grupo escultórico conocido como Muchachas al sol, en la Glorieta de las Cigarreras, en el barrio de Los Remedios.

Todas estas intervenciones se realizan también dentro del contrato anual de conservación de monumentos en la vía pública, que permite responder de manera rápida y eficiente a problemas de mantenimiento de estos elementos sin la necesidad de elaborar ni aprobar un proyecto de conservación. Consciente de la importancia de estas actuaciones, la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente ha aumentado este año la dotación económica para estas acciones hasta los 151.000 euros. Muchos de los monumentos en los que se interviene están declarados Bien de Interés Cultural y constituyen valiosos ejemplos del patrimonio histórico-artístico de nuestra ciudad.

En el caso del mural Verbo América, obra del artista chileno Roberto Matta, realizada con motivo de la Exposición Universal de 1992, se han llevado a cabo unos trabajos de emergencia como consecuencia de unos desprendimientos de azulejos producidos en uno de los dos muros que sostienen este mural, concretamente el derecho. La causa de que se produzcan estos desprendimientos radica en la inexistencia de juntas de dilatación de dichos muros, lo que provoca la aparición de fisuras.

Los trabajos, acometidos igualmente por Benza Conservación y Restauración, ha consistido en la limpieza y clasificación de los azulejos desprendidos, el sellado de la unión de los dos muros para evitar la penetración de agua, el cosido de grietas y fisuras para impedir su agrandamiento, el relleno de los espacios vaciados con mortero de cal y la eliminación de grafitis.

No es la primera vez que la Gerencia de Urbanismo interviene sobre este monumento. En 2011 este organismo realizó una actuación de restauración de este mural, que incluyó la recuperación de las piezas de cerámica desprendidas. En los años sucesivos también se han realizado actuaciones puntuales de mantenimiento, como el sellado de la parte superior del muro derecho en 2014.

A la vista de los problemas de conservación que con frecuencia se presentan en esta obra, derivados en gran parte de las condiciones y características de los muros sobre los que está expuesta, el Ayuntamiento de Sevilla está realizando un estudio sobre la mejor alternativa para preservar este legado. De esta forma, se está considerando si mantenerlo en su lugar de origen pero sobre otro soporte con mejores condiciones o, si cambiarlo de ubicación. Ambas opciones tienen que ser aún analizadas y valoradas en profundidad.

La Cruz de la Cerrajería

Este histórico monumento del siglo XVII, emblema del Barrio de Santa Cruz, está siendo tratado en estos momentos. En concreto, la actuación consiste en la aplicación de un nuevo tratamiento inhibidor al hierro y una posterior pátina de cera para reforzar su conservación, tras comprobar que la última de las capas protectoras aplicadas se ha perdido.

Las causas se hallan en propia naturaleza del hierro en que está construido este monumento, que a estos efectos tiene un peor funcionamiento que otros materiales, como el bronce. A esta circunstancia, hay que añadir su total exposición a la intemperie. No obstante, tras una detallada revisión del conjunto realizada por los técnicos especialistas de Urbanismo, no se ha apreciado oxidación alguna en el hierro ni se ha detectado ningún daño en este bien patrimonial. Asimismo, Urbanismo ha consultado con expertos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico el nuevo tratamiento de protección, concluyendo que es el más adecuado y conveniente en este caso.

La Gerencia de Urbanismo ha intervenido en varias ocasiones en este monumento, la última se realizó durante el verano de 2018. Las tareas consistieron en la retirada de la capa de barniz de toda la superficie y en la eliminación de las cascarillas y herrumbre sueltas. Antes de ello, en 2015, Urbanismo llevó a cabo una actuación más profunda sobre este bien, que implicó el desmontaje de la Cruz pieza por pieza para la limpieza de todas ellas, así como la consolidación y recuperación de elementos originales.

Durante la ejecución de los trabajos de estos días, Urbanismo está contando con la colaboración desinteresada la Asociación de Vecinos Barrio de Santa Cruz, que ha cedido su local para el almacenaje de los útiles y herramientas de trabajo más delicadas.

Muchachas al sol

Esta misma semana dará comienzo otra intervención sobre las esculturas conocidas como Muchachas al Sol, ubicadas en la Glorieta de las Cigarreras, en el barrio de Los Remedios. Este conjunto escultórico, realizado en piedra caliza, adquiere una tonalidad anaranjada como consecuencia del óxido contenido en el agua que se emplea para el riego de esta zona ajardinada. La intervención de Urbanismo va dirigida por tanto a la eliminación de estas manchas de óxido para devolverles su aspecto y color original. Este organismo ya llevó a cabo una actuación similar en el año 2015.

Ambas esculturas son obra de Antonio Cano, quien las realizó en el año 1963 por encargo del Ayuntamiento. Se trata del primer monumento moderno instalado en Sevilla. Tras varios emplazamientos, en 1981 el Ayuntamiento decidió trasladarlas a su ubicación actual.