Virgen de la Antigua: la gran devoción de la Sevilla barroca
Las imágenes que fueron
Fue realizada en 1659 por Pedro Roldán y responde al modelo desarrollado en el retablo de los Vizcaínos o la Virgen de la Esperanza
De la Magdalena pasó a la iglesia de Santiago
Una imagen de una categoría excepcional. La Virgen de la Antigua es una obra de arte que trasciende lo puramente devocional, que podría formar parte de las mejores colecciones y museos mundo. Afortunadamente, aunque su situación no sea la más adecuada, se puede admirar en la iglesia de Santiago, sede canónica de la Hermandad del Beso de Judas. Se trata de una Dolorosa que fue una de las mayores devociones de la ciudad durante los siglos XVII y XVIII. Los historiadores han conseguido identificar a esta talla con la imagen que talló Pedro Roldán en 1659 para la Hermandad de la Antigua, Siete Dolores y Compasión, que residía en la capilla que hoy ocupa la Hermandad de Montserrat.
Esta Virgen arrodillada de talla completa puede considerarse la Esperanza Macarena de su tiempo. Aunque hay historiadores del Arte que todavía mantienen que la Virgen de la Antigua de Roldán es la que se venera en la Parroquia de la Magdalena, está documentado que tras la epidemia de peste que asoló Sevilla en 1649, la hermandad decide renovar sus imágenes.
En un inventario de la cofradía de 1673 se cita que la Dolorosa es obra de Pedro Roldán, una prueba más que vendría a corroborar que la imagen de la iglesia de Santiago fue la titular, mientras que la de la Magdalena, atribuida recientemente a Andrés de Ocampo, lo fue, pero anteriormente.
El historiador Antonio de la Banda identificó un grabado de la Virgen de la Antigua y ya intuyó que no se correspondía con la de Magdalena. El espaldarazo definitivo correspondió a Antonio Torrejón Díaz, que identificó la Virgen de Santiago como de Roldán por su concordancia y también logra documentar un trasvase de obras desde la Magdalena a la iglesia de Santiago.
"La imagen de la Magdalena fue la titular de la cofradía en el mismo tiempo que lo fue el Nazareno que hoy es de la Candelaria. Las dos imágenes están realizadas con la misma técnica y tienen las mismas dimensiones. Responde a la estética de Ocampo que se puede ver en el retablo de la iglesia de San Vicente. La Virgen de Santiago es la gran imagen barroca, la que salió bajo el palio de la Virgen del Valle, responde a los grabados y a lo que recoge el contrato de 1659 y antecede al modelo que podemos ver en el retablo de los Vizcaínos y en la Virgen de la Esperanza", añade Andrés Luque Teruel, doctor en Historia del Arte y profesor titular de la Universidad de Sevilla.
Luque Teruel insiste en los valores artísticos y patrimoniales que encierra esta Dolorosa barroca de Pedro Roldán, una de las mejores realizadas en el siglo XVII: "Es una imagen de tanta categoría que podría estar en un museo, aunque no es lo deseable. Podría estarlo igual que el Señor de Pasión junto a Las Meninas, o el Gran Poder con Zurbarán, o el Cristo de la Expiración de Triana junto a las Inmaculadas de Murillo, o el misterio de la Quinta Angustia junto a las obras de Rubens. Tienen la misma calidad que las pinturas. Pero la Virgen está concebida para el culto. Tiene una función y, como se puede, habría que dársela".
Como se puede ver en las imágenes que ilustran esta página, la Virgen de la Antigua no se encuentra en las mejores condiciones de conservación. Se hace imprescindible que el Arzobispado, como responsable subsidiario e la imagen, abandere su restauración para que pueda recibir culto de una manera digna, sea en la iglesia de Santiago o en otro templo.
La serie de exposiciones Imago Solis, cuya primera edición se inaugurará en la Catedral de Sevilla en el mes de octubre, puede ser la gran oportunidad para restaurar y exponer a la Dolorosa con todo su esplendor recuperado.
La Virgen de la Hiniesta quemada en 1932
Está considerada como una de las pérdidas patrimoniales más importantes acontecidas en la cofradías sevillanas. Aunque sin ningún documento que lo acreditara, la historiografía siempre atribuyó esta bella Dolorosa a la gubia de Martínez Montañés. Fue la primera imagen en ser vestida de hebrea.
La Virgen de la O, destrozada en 1936
Fue la primera imagen de Dolorosa que cruzó el puente de barcas para hacer estación de penitencia en la Catedral. Esta imagen, destrozada en el asalto perpetrado a la parroquia de la O el 20 de julio del 1936, estaba atribuida a Roldán, aunque sufrió importantes reformas. Fue restaurada hace unos años.
El Cristo de los Gitanos de Montes de Oca
Fue una de las imágenes que sucumbió a las llamas tras los sucesos de julio de 1936 en los que se incendiaron numerosas iglesias. Como la Dolorosa que también se perdió, estaba realizado por el escultor José Montes de Oca y gozaba de una gran devoción por su gran valía artística.
También te puede interesar
Lo último