El crecimiento de Cs y Vox hacen retroceder al PSOE en la provincia y deja rezagado al PP

El PSOE de Sevilla volvió a ser ayer la fuerza más votada en la mayoría de los municipios de la provincia: 94 de los 105. Pero el color rojo, que se usa para distinguir en el mapa a los pueblos territorio del PSOE, se destiñe de forma importante. En 2015, fue la más votada en 101 localidades (todas, salvo Tomares, Espartinas y Gines, donde ganó el PP, y Marinaleda, de IU) y allí donde se mantiene la sangría de votos es grave: en Dos Hermanas pierde más de 6.800 con respecto a 2015; en Alcalá de Guadaíra, 4.200; al igual que en Utrera. En Mairena del Aljarafe, se deja 1.300 votos y, en La Rinconada, 2.300, con bajadas en la participación que superan los ocho puntos.

El beneficiado no es el PP, que ve alejarse la posibilidad de soñar con ser fuerza de alternancia en Sevilla en unas autonómicas. Sólo logra mantener Espartinas, donde siempre ha sido el más votado, pero por 162 votos sobre Cs, que pese a la controvertida gestión en el único Ayuntamiento en el que ganó las municipales, suma una veintena de votos con respecto a 2015. El PP pierde su otro referente histórico, Tomares, donde Cs sí logra el ‘sorpasso’ por 72 votos.

Los beneficiados por el retroceso de las formaciones del conocido como bipartidismo son, sólo en parte, Adelante Andalucía y, sobre todo, Cs y Vox, que en número de votos son los que logran subidas exponenciales, que se intuyeron en las anteriores autonómicas con la formación naranja, pero que son una sorpresa en el caso de Vox.

Adelante Andalucía logra poner un color distinto en siete municipios, aunque son pequeños y, en su mayoría, ya eran territorio del SOC e IU: Marinaleda, Martín de la Jara, Pedrera, Badolatosa, Casariche y Peñaflor. Palomares, en el Aljarafe y con 8.500 vecinos, es el mayor, pero gana con un voto de diferencia con Cs.

El problema que ha tenido la confluencia entre Podemos e IU en la provincia es que no la logrado el tirón que esperaban en el voto urbano, que suma en el elecciones como esta. Teresa Rodríguez y Antonio Maíllo han obtenido, de hecho, menos votos juntos que por separado en las elecciones al Parlamento andaluz de 2015 en núcleos tan importantes como Dos Hermanas, a pesar de que logran ser ahora segunda fuerza; y en Alcalá de Guadaíra, donde se han dejado en el camino 3.464 sufragios y Podemos pierde el segundo puesto que logró en solitario. Les adelanta Cs.

Los que más pescan del desgaste de votos del PSOE y el PP son Cs y Vox, que partían de niveles muy bajos. El partido de Albert Rivera se coloca por primera como el más votado en Tomares, con un millar de votos más que tres años antes; y Bormujos, donde suma 640 sufragios y supera por cinco votos al PSOE. El PP que ganó en 2015, queda tercero.

En Dos Hermanas, Cs suma 4.120 votos a los que obtuvo en 2015; en Alcalá de Guadaíra, sube en 2.400 y se coloca segundo; en Mairena del Aljarafe, suma 1.500 y en Utrera se multiplica por dos, al pasar de 2.023 sufragios a 4.915. También aporta muchos votos naranja Écija, donde se ha pasado de los 1.735 de 2015 a los 3.931 de ahora.

Y, aunque no logre colocarse como primera opción en ningún municipio, la provincia también ha aportado muchos votos a Vox: En Dos Hermanas logra 6.587, apenas 200 de diferencia con el PP; en Alcalá, logra 3.397 sufragios y en Mairena del Aljarafe, 2.500. Es segunda fuerza en Sanlúcar la Mayor, donde pasa de los mil votos; en Tomares salta de 159 a 1.702; en Espartinas, de 62 a 1.223 y supera de largo el millar de votos en muchos municipios de más de 20.000 habitantes, con 2.322 en Utrera, 1.114 en Lebrija o 1.873 en Los Palacios, entre otros.