Cobre Las Cruces iniciará en las próximas semanas la negociación de un ERTE

Cobre Las Cruces, la empresa propietaria de la mina que se extiende entre los términos de Gerena, Guillena y Salteras, ha comunicado oficialmente a los representantes de la plantilla su intención de llevar a cabo un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por la reducción de carga de trabajo, tras el grave corrimiento de tierras que se produjo en la zona norte de la corta el pasado 23 de enero.

La empresa tiene contratadas directamente a 250 personas (sin contar las subcontratas) cuya labor se concentra en la planta hidrometalúrgica, cuya producción se ha retomado con el material almacenado, a pesar de que la Junta ha suspendido provisionalmente los trabajos extractivos en la mina. Sin embargo, parece no será suficiente para que el personal se mantenga al cien por cien.

La duración y el número de personas que se verán afectadas por ese ERTE no se ha concretado, aunque la empresa ha avanzado que no debería superar el 10% de la plantilla. Una vez que se ha comunicado, hay siete días para que se cree la mesa de negociación y se inicie el periodo de consultas.

Según Manuel Ponce, secretario general del Metal, Construcción y Afines (MCA) de la Federación de Industria de la UGT, lo primero será determinar si hay causas que justifiquen esa suspensión temporal de empleo e intentar que, en su caso, afecte al menor numero de personas y por el menor tiempo posible.

Por lo que les ha trasladado la empresa, cuyo único accionista es el grupo minero canadiense First Quantum, los trabajos de recuperación de la zona afectada por el derrumbe durarán unos siete meses, aunque Cobre La Cruces ha insistido en que su intención es acortar los plazos, siempre que se garantice la seguridad.

El personal contratado directamente por Cobre Las Cruces representa sólo una parte de todo el que trabaja en la explotación sevillana, la mayor mina a cielo abierto de Europa. A través de subcontratas, dependen de la misma otras 590 personas, aproximadamente.

Varias de esas contratas también han planteado expedientes temporales de empleo. Una de ellas es Ilunion, de limpieza industrial, con unos 41 trabajadores, de los hay trabajando en la actualidad unos 27. Al resto se le ha dado vacaciones. La empresa ha planteado un ERTE que afecta a la totalidad, aunque se está negociando para reducir el número.

También habrían planteado ERTE otras empresas, como Ditecsa e Ingeremont, aunque la Inspección de Trabajo no los habría aceptado por justificarse por una casua de fuerza mayor y no por razones productivas u organizativas, según la UGT.

"Hay preocupación e incertidumbre por el futuro de la mina", señala Ponce, y por si, tras los trabajos de estabilización, se podrá retomar la actividad minera y el nuevo proyecto de mina subterránea, para prolongar la vida de la explotación que tenía la empresa.

Tras el anuncio de estas medidas de suspensión de empleo temporal la dirección de la compañía ha insistido en que está "analizando las medidas necesarias para garantizar la continuidad y supervivencia del proyecto, uno de los más importantes de Sevilla y Andalucía en términos de creación de riqueza, innovación y empleo", recuerda.

"Se está llevando a cabo un reajuste de la actividad de las empresas contratistas que prestan servicios en el complejo minero para redimensionar sus servicios a las necesidades actuales".

En cuanto al personal directo de Cobre Las Cruces, la dirección ha comunicado al comité de empresa y a los propios trabajadores en una asamblea, el pasado viernes, el inicio de negociaciones para valorar fórmulas de un posible ajuste, que no debería superar el 10% de la plantilla.

"La dirección de la compañía apuesta por el diálogo permanente, abierto y constructivo con los trabajadores y sus representantes para contribuir entre todos a resolver la situación por la que atraviesa la empresa y garantizar su continuidad en el futuro", subraya.