En La Antilla todos los propietarios pagamos impuestos, pero no todos obtenemos servicios. Mientras este verano, a la subida de la playa, en determinadas zonas había contenedores para que los bañistas arrojasen sus desperdicios, en otras zonas no los había, me imagino que para ahorrar gastos por parte de le empresa concesionaria del servicio. Ello conllevaba que la gente depositase las basuras en las papeleras del paseo marítimo, demasiado pequeñas para el caudal de desperdicios allí arrojados, que acababan por los suelos. Yo tengo una papelera municipal colocada a un metro de mi terraza, en la parte con más afluencia de la zona de poniente. Dicha papelera rebosa de basura al final del día y el viento esparce la misma por el suelo a las puertas de mi casa teniéndola que limpiar nosotros mismos. Pagamos el impuesto y hacemos el trabajo. A finales de julio reclamé al Ayuntamiento y pusieron contenedores abajo en la playa, pero a partir de mediados de septiembre el responsable de limpieza ha vuelto a retirar los mismos y las basuras han vuelto a mi puerta. La afluencia a la playa sigue siendo alta especialmente los fines de semana y las basuras se acumulan en las papeleras del paseo marítimo. Lo curioso es que en otros lugares de la misma hay puntos limpios con todo tipo de contenedores. Sólo le pido a los responsables de la limpieza el mismo nivel de higiene que ellos desean para los alrededores de sus viviendas. En fin, ésta es alguna de las "ventajas" de la privatización de servicios.