Comienza tu rutina de belleza posvacacional introduciendo algunos buenos hábitos

Durante el verano nos dedicamos a disfrutar del buen tiempo y las vacaciones. Playa, chiringuito, sol, salidas nocturnas, todo un cóctel de acciones que acaban pasando factura a nuestra piel. Los excesos que hemos tenido durante la época estival y otros factores como la sal del agua de mar, humedad, cloro, cambios en nuestra alimentación o excesos de alcohol y tabaco son factores que, si descuidamos, pueden verse reflejados en nuestra piel con mayor facilidad.

Es normal que estos meses atrás hayas dejado un poco de lado -o alterado- tu rutina diaria de cuidados faciales, pero no te preocupes. El verano llega a su fin y trae consigo la vuelta al trabajo. Que aunque no suene bien del todo, es una buena época para introducir pequeños cambios y nuevas rutinas.

Buenos hábitos

Como por ejemplo volver a optar por una dieta sana y equilibrada donde no falten cinco raciones de fruta y verdura al día, legumbres, cereales, vitaminas y minerales, o carbohidratos y proteínas, principales fuentes de energía. También es muy importante hidratarnos, beber agua diariamente, y realizar alguna actividad física al menos 2-3 veces a la semana. Además, es recomendable reducir el consumo de alimentos procesados o con harinas refinadas, bollería industrial, fritos, embutidos con exceso de grasa o alcohol.

Como en la alimentación, nuestra piel también necesita de unos cuidados diarios igual de importantes a los que debemos habituarnos a realizar. Existen una serie de pasos esenciales que no puedes olvidar. A continuación toma nota de algunos de los consejos que puedes llevar a cabo para tener una piel perfecta tras el verano.

Una buena rutina de higiene facial en casa

No puedes retrasar más tus cuidados faciales, para ello, lo primero que debes conocer bien es tu tipo de piel. Para saber qué productos serán más acordes a la hora de cuidarla y establecer tu rutina y tratamientos básicos.

En primer lugar debes limpiar tu rostro, con el producto que mejor te vaya, desde leche limpiadora, un jabón antibacteriano, agua micelar o desmaquillante en aceite. Según la sensibilidad de tu piel, lo ideal es exfoliar tu rostro para eliminar células muertas. No todos los días, para que nosea demasiado agresivo. Un peeling suave es esencial para notar como tu piel empieza a estar limpia y cuidado. Pon especial atención en el cuidado diario de este tratamiento para así evitar un peeling más profundo.

Hidratación, que nunca falte

El paso que debes seguir después es el de hidratar tu piel. Puedes empezar con un sérum especifico para tu piel. usarlo ates de la crema hidratante que complete el proceso de hidratación. Para terminar aplica mascarillas faciales al menos una o dos veces por semana. Si prefieres utilizar productos naturales puedes crear tus propias mascarillas caseras que te ayudarán a hidratar tu rostro y regular el pH.

Si vas a salir de casa no olvides utilizar protección solar. Existen diferentes tipos de cremas por ejemplo, puedes usar alguna con color, ideal como base de maquillaje. Otros productos que puedes incluir en tu rutina son el tónico facial que limpia, refresca y ayuda a restablecer el pH natural de la piel. Contorno de ojos que borre los signos de cansancio; ojeras o arrugas sin importar que cuentes con una edad avanzada, ya que resulta ideal para prevenir, mantener hidratadas y cuidar esta zona de tu piel.

Aquí verás con más detalle todo lo que tienes que hacer si tienes alguna duda con los pasos que tienes que seguir para cuidar tu piel a diario, e incluso algunos de los productos que puedes utilizar para mejorar la condición de tu rostro, insertando pequeños hábitos en tu día a día.