Etapa 6 del Camino del Sur: Cañaveral de León - Valencia del Ventoso | Un largo recorrido por tierras pacenses

La sexta etapa del Camino del Sur es la más larga de toda esta ruta. Nos enfrentaremos a 36 kilómetros por una geografía algo ondulada, aunque con mayor predominancia de desnivel negativo. El trazado termina de atravesar Sierra Morena a la vez que intercambia las tierras onubenses por las pacenses. Es un recorrido interesante donde veremos cómo se altera el paisaje a la vez que disfrutamos de varios lugares con un patrimonio histórico importante con dos castillos espectaculares.

La etapa comienza en el Ayuntamiento de Cañaveral de León. Desde aquí tomamos la calle El Pantano hacia la izquierda. Al fondo, donde está la Fuente Redonda, doblamos otra vez a la izquierda para enfilar la carretera de Hinojales (HU-5300). Andados unos 300 metros, en un cruce, giramos a la derecha para ir por la HU-9108, que comienza a subir a la Sierra del Puerto. Estas montañas hacen de frontera natural entre Andalucía y Extremadura. Tras un par de curvas, el trazado sube por la ladera de un cerro hasta alcanzar un mirador arriba del todo, a 643 metros sobre el nivel del mar. Aquí están los carteles indicando el cambio de comunidad autónoma. Tendremos también una panorámica impresionante de todo el valle que acabamos de dejar atrás, con la Sierra de Hinojales al fondo.

Badajoz nos da la bienvenida con una bajada por una sinuosa carretera de montaña, la BA-072. El descenso es suave, pero la estrechez de la calzada y sus abundantes curvas sin visibilidad exigen que estemos atentos a un tráfico que, pese a ser escaso, puede darnos algún susto. Avanzando rodeados de dehesas, dejamos de bajar para iniciar un nuevo ascenso a los 5 kilómetros de caminata. Esto ocurre aproximadamente a la altura de unos edificios, llamados Casas Llano Venegas. De esta manera, la carretera vuelve a encadenar repechos para buscar poco a poco una cota superior a los 740 metros de altura. Delante tenemos la Sierra del Barrero, aunque no la coronaremos; rodeamos su falda para alcanzar la localidad de Fuentes de León.

Esta primera población extremeña del Camino del Sur tiene el honor de ser el pueblo a más altura de la provincia de Badajoz. Tenemos aquí la posibilidad de parar en algún bar o comprar en tiendas, aunque también tendremos ocasión de hacer esto en el siguiente pueblo, que está relativamente cerca (a 7,5 kilómetros). Atravesaremos esta población de sur a norte, accediendo a ella junto a la piscina municipal y avanzando por la calle Real hasta la Plaza de España, donde se ubica su Ayuntamiento. Desde aquí, continuamos por la calle Juan Carlos I y, sin desviarnos, vamos hasta la Fuente del Altozano. Seguimos de frente por la calle del mismo nombre hasta una bifurcación. Ahora vamos a la izquierda por la avenida de Portugal. Vemos la plaza de toros del pueblo y andamos por la calle Parada hasta conectar con la carretera BA-092. Mantenemos el lateral derecho hasta superar el cementerio.

La acera se acaba en la Cruz de Hierro. También concluye aquí el largo ascenso que llevamos afrontando desde hace unos 5 kilómetros. Ignoramos el ramal que sale por la derecha y proseguimos por la carretera, pero ya en el arcén izquierdo. Tras una pequeña ermita, sale un carril por la derecha: es nuestra ruta.

El camino va bajando suavemente, flanqueado por una sucesión de vallas y muretes de piedra. Mientras tanto, van quedando atrás las últimas estribaciones de Sierra Morena. Los cerros se dispersan cada vez más. Hay que tener mucho cuidado en este tramo porque vamos a encontrar muchas ramificaciones. Por suerte, el Camino del Sur está bien señalizado por aquí. Tras dos curvas en ángulo recto, una a la izquierda y otra a la derecha, debemos elegir el camino izquierdo en la primera bifurcación. A pocos metros, nos topamos con otra: ahora hay que ir a la derecha. Enfilamos una larga recta que atraviesa el bonito Pinar de Alba, sin duda una isla de vegetación entre tanta dehesa. En la próxima separación de senderos, hay que ir a la izquierda. En 400 metros damos con una encrucijada junto al Cortijo de Cantiñas. Seguimos de frente mientras ya tenemos una espectacular vista de Segura de León con su castillo coronando un cerro. Es nuestro próximo objetivo.

En otra bifurcación, tomamos el carril de la izquierda y en poca distancia conectamos con la BA-072, la misma carretera que salía de Fuentes de León. Vamos hacia la derecha, rumbo al pueblo. Tras un kilómetro por el arcén y haber pasado un área de servicio, tomamos una calle que sube muy empinada por la derecha. Ya estamos en la segunda localidad intermedia de esta etapa. Hemos recorrido 16 kilómetros. Aún queda mucho para acabar.

Segura de León es precioso. Su impresionante perfil destaca sobre todo por su castillo del siglo XIII situado a 650 metros de altura. Domina el municipio y todo el territorio alrededor. Esta fortaleza fue sede de una encomienda de la Orden de Santiago y actualmente se encuentra en un estado de conservación extraordinario. Aunque está en manos privadas, permiten visitas. Además del castillo, merece la pena desviarse del camino y visitar el otro edificio que destaca: la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, cuya construcción originaria data también de finales del siglo XIII, aunque sufrió alteraciones posteriores.

Nuestro recorrido por este pueblo sigue las calles Guardia Civil y Maestro Don Jacinto hasta la Plaza de España, donde se halla el Ayuntamiento y la calle que da acceso al castillo. Las flechas amarillas nos llevan por la calle Enfermería, la Plaza Nuestra Señora de los Remedios y se despide del pueblo bajando por el camino del Cementerio. En un cruce, veremos la puerta de la Ermita de los Remedios y el camposanto de la localidad. Mantenemos la calle unos metros más hasta tomar un carril de tierra que sale a la izquierda tras una curva.

Nos quedan por delante 12 kilómetros que se pueden hacer interminables. El paisaje se va aplanando notablemente mientras que la dehesa que iremos atravesando comenzará a dar la sensación de que ralea. Hay muchos muretes cuarteando a un terreno dedicado a la cría de ganado. Destacarán en ciertos tramos alguna que otra pedrera que romperá ligeramente un paisaje que puede cansar por su reiteración. El amplio carril por el que iremos avanzando alcanzará algunos cruces, pero siempre tendremos clara la orientación.

Tras salir de Segura de León, el primer accidente geográfico destacable es el Cerro de la Centinela a nuestra derecha. Lo rodearemos en busca del puente sobre la carretera EX-201. Tras un brusco giro a la izquierda, nos encontramos una estación depuradora y el Descansadero del Charco Hondo. En este punto, podemos decir que ya hemos pasado el ecuador de la etapa.

Damos algunos pasos junto al Barranco de Piedralgana antes de internarnos en los terrenos del Cortijo de la Chamorra. Si miramos atrás, veremos cómo el castillo de Segura de León sigue dominando el territorio. Tendremos una visual clara del mismo durante gran parte de este extenso tramo. Tendremos la extraña sensación de que no avanzamos.

En el kilómetro 21,5, alcanzamos un amplio cruce. Seguimos de frente. Tras medio kilómetro tomamos el sendero de la izquierda en la bifurcación. Más adelante, damos con una encrucijada: aquí hay que tomar la segunda salida a la izquierda. Así llegamos a las proximidades del Cerro de la Mina, donde observaremos que hay muchos bloques de piedra a ambos lados de nuestro carril a la vez que hay una mayor presencia de matorral.

El próximo cerro que tenemos delante es el de Cantalgallo. También lo rodeamos hasta encontrarnos las casas del cortijo homónimo. Justo después, el carril principal da un giro a la derecha mientras sale de frente una trocha por una zona poco desbrozada flanqueada por muros bajos. El mojón con la vieira nos deja claro por dónde ir: el camino estrecho. En esta parte, el sendero se vuelve más accidentado, con un descenso algo abrupto y piedras sueltas. Como se ha indicado, la vegetación se nos meterá por medio en ciertos tramos.

El callejón nos deja justo ante la vía del tren. Cruzamos con cuidado y bajamos hasta la carretera BA-160. Ahora toca caminar por su lateral hacia la derecha. Faltan 7 kilómetros para llegar a la meta. Esta zona se nos hará bastante dura. El asfalto suele ser matador de por sí, pero tras 29 kilómetros a cuestas se convierte en un calvario. Hay que andar 2 kilómetros por la calzada.

Pasado el Cortijo de Aracena, la carretera describe una amplia curva a la derecha. Las flechas nos mandan por un carril de tierra que sale a la izquierda rumbo a la puerta del Cortijo de El Tancón. Este es uno de los puntos negros de este Camino del Sur. El trazado oficial contempla este giro a la izquierda y sigue el camino de tierra. El sendero sigue el vallado de la finca en busca de un vado para cruzar el Río Ardilla. Por desgracia, este tramo puede presentar tal cantidad de maleza, con zarzas incluidas, que nos dificultará notablemente el avance. Además, hay una cancela que saltar. No es muy recomendable, pues podemos salir bien arañados. Si vemos la vegetación muy alta y no somos capaces de distinguir la senda, lo mejor es cruzar el río por el puente de la carretera sin abandonar el pavimento en ningún momento. Sea como sea, al final, ambas opciones se unen a poca distancia de la Ermita de Nuestra Señora del Valle.

Ya estamos a solo tres kilómetros de la meta, pero último tirón será otra vez por el arcén de la carretera BA-160. Ligeramente, sube hasta alcanzar el final de esta dura etapa. Será la última prueba psicológica del día para un cansado peregrino que tendrá que soportar la dureza del sol.

Valencia del Ventoso destaca también por su castillo, que entra más bien en la categoría de casa fuerte. La Casa-Palacio del Comendador, como se llama realmente, fue construida originalmente en el siglo XIV por la Orden del Temple y desde ella se realizaban labores de gobernación civil. Posteriormente, fue reconstruido en el siglo XV por un comendador de la Orden de Santiago, que ya le dio el aspecto actual. El edificio se puede visitar y merece la pena darse una vuelta por sus bonitos alrededores, con unas buenas vistas de todas las dehesas que acabamos de atravesar andando. También destaca la enorme Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Esperanza. Viendo ambos edificios, nos podemos hacer una idea clara de la importancia que tuvo este municipio en el pasado.

Ya hemos dejado atrás Sierra Morena y sus bellas dehesas. A menos de 25 kilómetros, estamos en la recta final hasta de Zafra, punto donde este Camino del Sur desembocará en la Vía de la Plata.