Pajarito frito, la tapa de Sevilla que no todo el mundo se atreve a probar

Hay algunas tapas en Sevilla que, por su nombre, generan mucha sorpresa, especialmente a quienes no son de Sevilla y las ven escritas en las cartas de los bares. Comidas como los caracoles y las cabrillas, los famosos lagartitos o, en este caso, los pajaritos fritos son algunas de las más llamativas. Pero, ¿qué son realmente estas últimas?

Pajaritos fritos

Los pajaritos fritos son un tipo de comida propia del sur de España y que, normalmente, se sirve en forma de tapa y que la conforman aves de pequeño tamaño que se fríen y se sirven sobre el plato, sin la cabeza. En algunas ocasiones también se puede asar. Aunque pueda parecer raro, es parecido a un pollo de tamaño más pequeño.

Para hacerlos se desplumaba al ave en cuestión, en ocasiones se adobaba y se ponía a freir con algo de pan rallado, ajo y perejil en algunas ocasiones.

Las aves que antaño se solían usar en la elaboración de este plato era cualquiera que tuviera unas proporciones reducidas. De hecho se solían servir de varios tipos en un mismo plato. Sin embargo, en la actualidad esto está completamente prohibido desde el año 2003 y las únicas que se permiten hacer son las codornices de cultivo, ya que es una actividad cinegética que no está permitida.

Los de Casa Ruperto

En Sevilla hay algunos lugares en los que se sigue sirviendo este plato, tanto en la capital como en la provincia, pero uno de los más famosos es Casa Ruperto, un establecimiento mítico de la ciudad ubicado en Triana.

Casa Ruperto se abrió en la calle Santa Cecilia en el año 1970 de la mano de Ruperto Blanco Caro, quien falleció el año pasado a la edad de 93 años. Tras haber regentado dos negocios con anterioridad, Casa Ruperto abrió en Sevilla para ofrecer tapas variadas entre las que destacaban las codornices fritas y las cabrillas en salsa. Estas codornices son especialmente sabrosas y populares porque las dejan macerando dos días en un adobo cuya receta se desconoce durante dos días para después freirlas. Ademas de estos platos también tienen otras preparaciones como la pringá, la carne mechada, el pincho de pollo o el lomo con roquefort.

A pesar de su aspecto de taberna familiar este bar con solera de Triana fue galardonada en julio de 1987 por la prestigiosa Sociedad Gastronómica de Nueva York con el premio Garbanzo de Plata.

El local de Casa Ruperto tiene una barra interior metalizada y terraza, por lo que adentrarse en él es como volver a los bares de siempre. Abre de viernes a miércoles en horario de 12:00 a 16:00 horas y de 20:00 a 24:00 horas, por lo que sirven tanto almuerzos como cenas. Los jueves el establecimiento permanece cerrado por descanso del personal.

Casa Ruperto se ha erigido como uno de los lugares de visita obligada si se está por la zona y se quieren saborear no solo sus codornices sino el ambiente propio de un bar de siempre en un barrio tan famoso como Triana.