La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El rey brilla al defender lo obvio
Originalmente una abacería era un puesto en el que se vendían productos al por menor tales como aceite, vinagre, bacalao, legumbres y algún destilado, como el aguardiente. Posteriormente esta adquiriría la apariencia de almacén o tienda y aunque en la actualidad su aspecto haya cambiado notablemente (ahora está a caballo entre una tienda y un bar), sus estantes y la disposición de sus productos suelen conservar la esencia de antaño.
De esta manera en la actualidad encontramos que estos establecimientos además de ofrecer sus productos tradicionales también tienen una amplia gama de licores y vinos, productos escurtidos, chacinas o conservas.
El origen de estos peculiares puntos de venta se remonta a la época musulmana, cuando se empezó a utilizar el término abad referido a aquellas personas dedicadas a la elaboración de productos derivados de la harina. Siglos más tarde este concepto daría lugar a establecimientos (abacerías) dedicados a la venta de bienes de primera necesidad.
En Sevilla hay algunas de ellas que tienen una notoria antigüedad y otras que son de más reciente creación. Lo que está claro es que todas ellas guardan la esencia de antaño. Aquí te dejamos una selección de cinco de las más conocidas que hay en la ciudad:
Si por algo es característica esta abacería es porque es especialista en preparar desayunos tradicionales con molletes de Amtequera y, sobre todo, con jamón ibérico recién cortado. Está regentada por el matrimonio formado Juan Antonio Martínez Rivera y Dolores Millán. El nombre del establecimiento se debe a que se ubican en la plaza de San Román.
Anteriormente el local era una carnicería y charcutería pero en 2019 decidieron cambiar el concepto y convertirlo en un lugar donde desayunar y tapear con el estilo de una abacería. También sirven chacinas, quesos, conservas, y unos bocatas llamados San Romancitos. Está en calle Sol, 32.
Este local nació en 1995 y en ella se pueden adquirir todo tipo de productos derivados de la harina y otras legumbres y a la vez disfrutar de una amplia carta que ofrece guisos y potajes caseros así como algunas tapas como las pavíaas de bacalao o las papas con langostinos. También tienen una amplia carta de vinos que no deja indiferente a nadie. También funcionan como tienda, otorgándole el sentido real de una abacería. Están en la calle Teodosia, 53.
Este emblemático local lleva en pie desde 1926 en el barrio de El Porvenir. Es, en realidad, una tienda de alimentación de ultramarinos que también funciona como bar manteniendo la estética de sus inicios en los años 20.
En su carta hay tapas y raciones de boquerones en vinagre, chacinas o banderillas de atún con queso. También hacen montaditos y venden productos para llevar. Están en la calle Progreso, 7.
Este negocio ubicado en la calle Gamazo es, sin duda, una de las abacerías más conocidas de la ciudad. Cuenta con decoración cofrade y torera en sus paredes. De Casa Moreno destacan sus montaditos como el de chorizo picante con cabrales. También venden conservas. Se encuentra en la calle Gamazo, 7.
Este rincón sevillano es famoso por su jamón. Se pueden ver colgados y degustarlos con unas tapitas en el momento. Todo lo que hay en el local se puede llevar a casa.
De su carta destacan los embutidos y las conservas aunque también tienen tapas como la torta de Inés Rosales con salmón y guacamole o con pisto verde y queso fundido. Está en la calle Hernando Colón, 9.
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