¿A dónde van a parar las naranjas de los árboles de Sevilla?

Quien haya probado las naranjas de los árboles de Sevilla habrá podido comprobar que son muy amargas y que no se parecen a la naranja de mesa que se suele tomar en casa.

Esto se debe a que el tipo de naranja de los árboles de Sevilla no son para consumo, principalmente, sino que son naranjas ornamentales, puramente decorativas, que se retiran cada año para limpiar los árboles y evitar molestias con sus caídas y la suciedad que puedan provocar. Esto ha traído consigo múltiples críticas a lo largo de los años ya que se ha considerado grotesco tal despilfarro de naranjas.

Los trabajos de recogida de naranjas en Sevilla se extienden desde principios de enero hasta el mes de marzo, por regla general y aunque las naranjas no se consuman como alimento se le dan otros usos.

Por ejemplo, se utilizan para hacer compost o, incluso, cosméticos, en vertederos autorizados; también sirven para la alimentación del ganado caprino en algunas granjas e incluso en la planta EDAR Copero de la empresa metropolitana de aguas Emasesa se usa para la fabricación de compost o la generación de electricidad a partir del gas generado.

Cierto es que se ha llegado a decir que estas naranjas se utilizan para elaborar mermelada y que se venden fuera de España, en lugares como Reino Unido o Austria. Sin embargo, también se desaconsejan para este uso debido a la contaminación que pueden recibir estos cítricos que se encuentran en la calle.

En cualquier caso no hay que confundir estas naranjas con las se mandaban anualmente a la Familia Real Británica desde los naranjos del Alcázar de Sevilla, una tradición que se recuperó hace unos años para que con ella se elaborara la tradicional “Seville Orange Mermelade.

Sevilla es, en la actualidad, la ciudad con más naranjos del mundo con cerca de 40.000 árboles repartidos por toda la ciudad. Aunque en menor medida esto también sucede en ciudades como Málaga o Valencia. El origen de los naranjos en Sevilla está relacionado con un afán por fabricas perfumes con el olor de su azahar en la época musulmana.