Este clásico de Dos Hermanas con tapas inmejorables se estrena por todo lo alto en Los Bermejales

Su nombre es El Moli y es uno de los bares más míticos de Dos Hermanas. En él sirven una amplia variedad de tapas tradicionales con toques únicos que han convertido este negocio familiar en un indispensable de la ruta de los mejores bares del pueblo nazareno. Tan es así que este verano han conseguido abrir su segundo local, en esta ocasión en Los Bermejales.

Su historia

Detrás de este negocio se encuentra Manuel Molina, quien lo puso en marcha en el año 1984 con la entonces Venta Moli. En 1997 se estableció en su actual ubicación, en la avenida España de Dos Hermanas. Su actual propietario hoy día es Francisco Molina, hijo de Manuel, junto a Kidia Montalbá. Era tal el éxito de su negocio en la localidad sevillana que llevaban dos años planteando la posibilidad de ampliarlo. No ha sido hasta ahora cuando han conseguido hacerlo. La idea es abrir más establecimientos en Sevilla, por lo que darse a conocer en la zona es uno de sus objetivos actuales.

Su carta

Las tapas que ofrecen en El Moli son las propias de la cocina tradicional andaluza, aunque con algunos toques diferentes que dan originalidad a sus comidas. Entre sus opciones hay croquetones de jamón, alcachofas en sasa de oloroso, costilla de cerdo asada, arroz ibérico al horno o pluma rellena de bacon y cheddar.

Además de sus almuerzos en El Moli sirven uno de los desayunos más famosos de la ciudad, cuyo trabajo para servirlos comienza a las 05:00 horas.

El nuevo establecimiento de El Moli tiene un aire muy cuidado, con decoración al estilo colonial y con muchos detalles vegetales. Hay mesas altas y bajas, tanto en el interior del local como en la terraza. Su local se encuentra en la calle Chipre, 1, en el sevillano barrio de Los Bermejales.