El Jueves de la calle Feria: el origen de un mercadillo con nombre propio en Sevilla

Hablar de El Jueves en Sevilla es conectar, directamente, con la historia de la ciudad y de una de sus vías más populares: la calle Feria. Para quienes no sean de la ciudad, El Jueves es el nombre que recibe uno de los mercadillos más míticos de la capital y que se llama de esta manera por celebrarse este día de la semana en la transitada calle Feria, junto a la Alameda de Hércules.

En la actualidad es un mercado de antigüedades y objetos de segunda mano como vinilos, ropa usada, estampas y cuadros de vígenes y cristos e incluso trajes de flamenca, pero en sus orígenes se ofrecían todo tipo de artículos.

Historia de El Jueves

La primera referencia a este mercadillo se remonta a 1292, cuando el rey Sancho II de Castilla reguló su celebración, pero es posible que se viniera celebrando desde antes. En ese momento ya era conocido como el Jueves por celebrarse ese día de la semana, sin embargo no sería hasta el siglo XIX cuando se lograría trasladar hasta la localización que conocemos en la actualidad: la calle Feria. Anteriormente se ubicaba en la plaza de Calderón de la Barca.

Fue el sevillano Ángel Vela, en su libro El Jueves. Apuntes de una feria milenaria (1991), quien habló de la historia de este mercadillo centenario que se ha convertido en el más antiguo de Europa.

Se calcula que el mercado es anterior a la Reconquista de Sevilla por parte de Fernando III de Castilla y que, posiblemente, surgió de forma genuina como continuación de los bazares árabes que se celebraban en la Sevilla musulmana. Tan es así que en el año 1833, el viajero e hispanista Richard Ford comparaba el mercadillo sevillano con el zoco de El Cairo.

A finales del siglo XX, el Jueves pasó por distintas etapas. En los dos primeros tercios de este siglo y debido al desarrollo turístico que estaba experiementando Sevilla de manera exponencial, el mercadillo ganó popularidad debido a que era un evento de interés para las personas que llegaban de fuera.

Sin embargo, durante la década de los 80, la droga que se consumía en algunos barrios colindantes y en la propia calle Feria cambió la atmósfera de este encuentro y el mercadillo entró en declive. Como consecuencia, a principios del 2010 el Ayuntamiento intentó poner fin a El Jueves y tras la movilización de sus vendedores, se constituyó una asociación para legalizarlo y regular la situación, lo que permitió que aumentara considerablemente la afluencia al mercado.

Qué se puede encontrar

A pesar de que en sus orígenes en el mercado se podían encontrar todo tipo de artículos nuevos, en la actualidad hay un claro predominio de antigüedades que copan los puestos de El jueves.

En ellos se pueden encontrar ornamentos, abalorios eclesiales, casullas bordadas, piezas de orfebrería, mantones de manila, frontales de altar, encajes de Brujas y hasta pequeñas imágenes para la devoción particular. También hay mantoncillos y trajes de flamenca, libros de segunda mano, postales y monedas antiguas e incluso soldaditos de plomo o vasijas a precios muy económicos. Aunque muchas personas traten de hacer regateos, sus comerciantes han comenzado a criticar los intentos de bajada de precios abusivos, especialmente por parte de turistas.

Desde hace ocho siglos este mercadillo que forma parte de la historia de la ciudad se ha venido todos los jueves de cada año con una única excepción: los Jueves Santos. El Jueves se instala desde las 08:30 hasta las 14:00 horas aproxidamente y como consejo es mejor acudir a él con dinero en efectivo y antes de las 12:00 horas, que es cuando está en pleno apogeo.