De edificio en ruinas a hotel de lujo en las 'setas'

Hotel Casa de Indias

Grupo Intur abre en el emblemático y abandonado durante años edificio de la Encarnación un hotel 'boutique' de cuatro estrellas

La terraza-solarium estará abierta al público y ofrece unas vistas únicas de las 'setas'.
La terraza-solarium estará abierta al público y ofrece unas vistas únicas de las 'setas'. / Antonio Pizarro
Ana Fernández

19 de febrero 2019 - 17:41

En el mismo edificio abandonado hasta hace poco más de dos años en plena plaza de la Encarnación y que llegó a ser víctima de los ocupas, hoy reluce un hotel de cuatro estrellas, Casa de Indias. Grupo Intur es el responsable de su rehabilitación, de manos del estudio del arquitecto Ignacio Toribio. Un hotel boutique que conserva su fachada regionalistaboutique, así como elementos interiores protegidos, pero que ha sido dotado con el diseño más innovador y la última tecnología, siempre salvaguardando el carácter más sevillano.

De convento a sobrerería

Construido en 1521 como Convento Regina Angelorum, los años han dado múltiples vidas y usos a este edificio de las setas. Fue sede de los almacenes y sombrerería La Castellana y, ya en el siglo XX, su empleo fue residencial, habitando la fachada que mira a la plaza familias nobles y en su parte trasera y lateral (ventanales hacía Jerónimo Hernández) casas vecinales con sus típicos patios, que el hotel también ha sabido transformar a la par que conservar.

El interior de las habitaciones tiene un diseño actual.
El interior de las habitaciones tiene un diseño actual. / Antonio Pizarro

El nombre de este hotel es otro homenaje a la ciudad en la que se encuentra. "Una fusión de Archivo de Indias y casa-palacio sevillana que hemos querido reflejar", ha explicado Myriam Gimeno, consejera delegada de Grupo Intur, en la presentación del hotel.

De aquel primer convento perviven parte de algunos de sus muros, que hoy lucen en algunas habitaciones como ladrillo visto. También los patios, la escalera principal y la mencionada fachada, en la que, "incluso, hemos querido mantener ese arco ondulado que el paso de los años ha dejado en su puerta", ha detallado Marisa Gimeno, responsable de Marketing del grupo hotelero, que ha añadido como antiguos vecinos de esta casa señorial han visitado ya las nuevas instalaciones con la sorpresa de encontrar restaurados muchos de los elementos antes deteriorados, como la solería original en algunos tramos de escalera o la barandilla, que permanece como antaño.

Solerías y barandillas antiguas han sido restauradas.
Solerías y barandillas antiguas han sido restauradas. / Antonio Pizarro

61 habitaciones con un diseño actual

Que un edificio con cuatro siglos de antigüedad reluzca con los diseños más actuales ha sido obra del proyecto de interiorismo de Las2Mercedes (Mercedes Peralta y Mercedes Valdenebro). En la decoración, priman la madera y la piedra natural así como los tonos claros y azulados.

En las habitaciones, 61 (entre suites junior y habitaciones estándar), la distribución, tamaños y alturas de techo también han sido respetadas y, por tanto, son dispares. "No hay dos habitaciones iguales", ha destacado Estrella Rodríguez, directora del hotel, que ha reseñado: "Los artesonados de madera originales también se han podido conservar en una de estas estancias".

Vistas a las 'setas' desde una de las habitaciones.
Vistas a las 'setas' desde una de las habitaciones. / Antonio Pizarro

Terraza con vistas a las 'setas' y cafetería para todos

Dos salas de reuniones y una de lectura completan las instalaciones que dejan en lo más alto, en la terraza-solarium –con piscina incluida–, su mayor atractivo, las vistas a las setas. Todo aquel que lo desee podrá acceder a esta zona, de más de 250 metros cuadrados, para disfrutar de un tentempié y del paisaje urbano.

También su cafetería-bar-restaurante, gestionado por la cadena andaluza No Piqui, está abierto a todos los sevillanos y turistas que pasen por el lugar.

Recepción del hotel con losas típicas sevillanas labradas para el hotel.
Recepción del hotel con losas típicas sevillanas labradas para el hotel. / Antonio Pizarro

150 euros por noche y una inversión de cinco millones

El cliente potencial de Casa de Indias es el francés, alemán y americano que, tal como indicó Iker LLano, de Grupo Intur, son los turistas extranjeros que buscan un turismo de mayor calidad y más numeroso en Sevilla.

El precio de las habitaciones dependerá de la temporada, pero rondará los 150 euros.

Con una inversión de cinco millones de euros, este nuevo hotel tiene empleadas a una veintena de personas, todas sevillanas.

Ésta no es la primera experiencia en el sector hotelero del Grupo Intur en Sevilla, ya que el año pasado abrió en La Campana los apartamentos turísticos Core Suites.

stats