El mayor secreto del Alcázar de Sevilla: el órgano de agua que solo algunos consiguen escuchar

Fuente de la Fama / Alcázar De Sevilla

Si alguna vez has paseado por los Jardines del Alcázar de Sevilla tal vez hayas observado que junto a la Galería de Grutesco, esos arcos que se elevan por uno de los laterales de la zona ajardinada, hay un espacio con algunos bancos que miran hacia la pared. Estos asientos no están ahí por casualidad. Son para poderse detener a escuchar la melodía que emana de un órgano hidráulico que hay detrás de la fuente enclavada en la pared y hacia la que están dirigidos dichos bancos.

Su nombre es la Fuente de la Fama y tras de sí hay todo un engranaje de piezas que conforman un órgano accionado con el agua de la fuente que se ha convertido en el único órgano hidráulico que se conserva en España y uno de los tres que apenas quedan en toda Europa. En el mundo solo hay cuatro órganos así.

En la web de los Reales Alcázares lo definen de la siguiente manera: "En los jardines del Real Alcázar, donde el agua es arquitectura, las fuentes, los surtidores y los juegos que la involucran se multiplican. Pero no solo agua, sino también música, como la que se puede escuchar cada hora en la Fuente de la Fama del Jardín de las Damas".

Sobre la fuente

El órgano de ña Fuente de la Fama data del siglo XVII y tiene influencia italiana. En la Fuente de la Fama se abre una ventana delimitada por un marco en forma de arco, en la que se encuentra una estatua de terracota de un niño que está de pie, con los brazos alzados por encima de la cabeza. Sobre él hay una pequeña estatua de plomo que sostiene una trompeta en la mano.

Tal y como reza en la propia web del Alcázar de Sevilla, se instalaron en ella diferentes mecanismos hidráulicos para que produjeran sonidos a partir de la transmisión del aire. En el año 2006, el catedrático de Arqueología italiano Leonardo Lombardi restaura esta cámara hidráulica con un nuevo mecanismo, un órgano hidráulico automático que funciona con la presión del aire producida por el agua, basándose en el sistema que tenían las fuentes en las villas italianas realizadas en la época renacentista y barroca del siglo XVI.

El británico Rodney Briscoe, quien también participó en esta restauración, es hoy día el único artesano capaz de restaurar la maquinaria de una fuente órgano de estas características.

Cómo escucharlo y verlo

El órgano de la Fuente de la Fama suena cada hora, así que para verlo solo hay que aguardar un poco al que el mecanismo se accione y comience a emitir su particular melodía. Lo único que se puede ver desde los bancos, que es donde se suelen quedar los espectadores, es la propia fuente moviendo el agua, como cualquier otra fuente.

Sin embargo, para quienes quieran apaciguar su curiosidad sobre el funcionamiento de dicho órgano, hay una pequeña apertura en el lateral de la fuente, justo en una puerta, a través de la cual se puede observar cómo se mueve el mecanismo en su interior que hace que se emitan los diferentes sonidos.

Todo un espectáculo que muy pocos conocen pero que merece la pena detenerse a contemplar para tener la experiencia completa durante la visita a uno de los monumentos más emblemáticos de Sevilla.

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