El flamenquín más grande de España se encuentra en Sevilla
Lo sirven en el bar Santa Marta, ubicado en la plaza de San Andrés de la capital.
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Aunque el origen del flamenquín es innegablemente cordobés, lo cierto es que muchos bares de Sevilla han incorporado recetas de la ciudad vecina en sus cartas, y han acabado siendo todo un éxito.
Este es el caso del bar Santa Marta, un negocio ubicado en la plaza de San Andrés de la capital hispalense que es famoso por lo rica que está su tortilla de patatas y por el gran tamaño de su flamenquín, un que es imposible comerse solo. Éste es de los más grandes de España y precisamente por este motivo se ha hecho famoso este bar.
Éste se hace con 600 gramos de cinta de lomo rellena de queso, y jamón ibérico atocinado cortado muy fino. El conjunto va rebozado en huevo y pan rallado y se fríe durante siete minutos. En este bar pueden llegar a servirse entre 80 y 100 flamenquines diarios. Lo empezó a hacer Manuel Caro, aunque al principio era más pequeño que el que se ofrece ahora. Va acompañado con patatas fritas caseras y su famosa mayonesa del establecimiento.
Otro de los platos estrella de esta casa, que no pasa desapercibida, es la tortilla de patatas, a la que han llegado a considerar como la mejor de la ciudad.
Sus ingredienntes son el aceite de oliva, las patatas, los huevos y la sal. En esta versión de la tortilla española no hay nada de cebolla pero esta tapa ha conseguido hacerse un hueco entre las demás tortillas de la ciudad. Para los amantes del huevo crudo, esta versión no está ni muy hecha ni muy seca y la sirven en cuñas.
El bar Santa Marta se ubica, en realidad, en la plaza de San Andrés, pero gracias a dicho establecimiento todo el mundo conoce este lugar por el mismo nombre que el bar, lo que ha dado lugar a algunas confusiones.
El bar Santa Marta se ubica en una plazuela que tiene a un paso la Campana o la plaza de la Gavidia. Se caracteriza porque en la época de primavera sus veladores se llenan del olor a azahar de los naranjos que hay en la plaza. En este bar se pueden degustar otros platos además de los anteriormente mencionados, como el pollo frito o la ensaladilla.
Santa Marta es, en definitiva, uno de los bares de Sevilla de los de toda la vida que perduran manteniendo su esencia y comidas de siempre.
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