¿Por qué hay una cruz blanca que pone "G. A. Bécquer" en el Parque del Alamillo?

Quienes hayan paseado por el Parque del Alamillo de Sevilla habrán podido observar que, entre árboles y en una zona que pasa desapercibida, hay una cruz blanca de piedra y de pequeñas dimensiones en la que se encuentra tallado "G. A. Bécquer".

Esta cruz, que podría asemejarse a una lápida y que hace pensar, a quien pasa por allí y tiene la suerte de encontrarla, que bajo ella se encuentran los restos del poeta y escritor sevillano, es en realidad un monumento que se hizo para recoger una de las peticiones del artista antes de morir.

La historia de la cruz

Corría la primera década de los 2000 cuando en Sevilla se hicieron varias actividades para celebrar el 100 aniversario del traslado de los restos de los dos hermanos Bécquer, Gustavo Adolfo y Valeriano, de Madrid a Sevilla, algo que sucedió en 1913.

En este contexto de conmemoración de dicho traslado, varios colectivos de poetas así como instituciones públicas consideraron cumplir uno de los deseos que el propio poeta expresó en su obra Cartas desde la celda. En ella dice lo siguiente: "(...) y cuando la muerte de término a mi existencia, me colocasen para dormir el sueño de oro de la inmortalidad a la orilla del Betis. (...) Una piedra blanca con una cruz y mi nombre serían todo el monumento".

El entorno del puente de la Barqueta y del río Guadalquivir marcaron la infancia y la juventud de Gustavo Adolfo Bécquer, hasta el punto de solicitar que este fuera el lugar en el que lo enterraran cuando su vida llegara a su fin. El 22 de diciembre de 1870 Bécquer fallecía en Madrid y a pesar de su petición expresa, no sería hasta el año 1913 cuando se conseguirían trasladar sus restos hasta la hispalense. Sin embargo, estos no fueron a parar a la orilla del río, como él deseaba, sino al Panteón de los sevillanos ilustres.

Fue en el año 2013 cuando, con las actividades conmemorativas por el aniversario del traslado de sus restos, un grupo de escritores comenzó a movilizarse para que, al menos de forma simbólica, el poeta sevillano tuviera un lugar de reposo y homenaje. Fue así como se determinó colocar la cruz blanca de piedra que él mismo había solicitado en su obra.

Con el objetivo de recrear lo que Bécquer dejó escrito en las descripciones que hacía en sus obras, se procedió a la plantación en este enclave de algunos álamos y cipreses que acompañaran al monumento.

Dónde está enterrado Bécquer

Los restos de los hermanos Bécquer, Gustavo Adolfo y Valeriano, se encuentran en la actualidad en el Panteón de los Sevillanos Ilustres, en la iglesia de la Anunciación de la capital, tras una petición que desde 1884 venía solicitando La Sociedad Económica de Amigos del País con José Gestoso como principal impulsor.

En la actualidad este panteón, en el que también se encuentran los restos de otros personajes como Fernán Caballero o Mateos Gago, se puede visitar gracias al Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (CICUS).