La cocina peruana echa raíces en Sevilla con el restaurante Lima

La gastronomía peruana, tan reputada en el planeta, poco a poco va ampliando su abanico en el mapa de la restauración sevillana. Y uno de sus más firmes exponentes, el chef Daniel Cárdenas, se ha decidido a echar raíces en la ciudad, como si de una yuca se tratara. La clausura de su restaurante Raíces, en pleno barrio de Nervión, le ha servido para volcarse en otro concepto más informal. Más callejero. Más cercano a la cultura de la tapa, tan de aquí. Y visto el éxito de la siguiente apertura a Raíces, el restaurante Lima Street Food de la calle Sinaí, acaba de abrir otro segundo Lima en la calle Recaredo número 7, junto a Becerrita.

Desde este jueves ya flota el olor dulzón de la yuca frita (8 euros) o de las croquetas de ají de gallina (9 euros) y circulan los coloristas y frescos platos de ceviche mixto (16), clásico (14,50) o de atún (15), las causas (11-12 euros el plato), anticuchos (11). Y las salchipapas (9) que tanto gustan a los más jóvenes.

Dani Cárdenas relata el origen de ese segundo Lima Street Food: "Tras cerrar Raíces, ha sido una manera de seguir adelante, a la gente le ha gustado mucho Lima, es una propuesta más divertida, más folclórica, con sabores más rurales, más de calle, y si la gente lo pide, pues lo hemos tenido en cuenta".

El nuevo irá adquiriendo su propia personalidad: "La misma gente te pide que te atrevas a más cosas, a otras aventuras. La carta con la que partimos es la misma de Sinaí, pero poco a poco vamos a ir modificándola con nuevos ingredientes, jugar con las temporadas y en época de setas, por ejemplo, jugar con ellas, los ajíes secos… podría estar bien".

El sevillano es cada vez más abierto a nuevas experiencias gastronómicas y en esa línea va Daniel: "Hay que ser atrevido y lo seremos". Aunque en algo seguirá siendo comedido: "Con el picante, menos. Cuidamos el paladar, la mayoría de nuestra clientela es sevillana y no están tan habituados al picante como allí. Lo manejamos, pero sutilmente. Y como todo se hace al momento, si el cliente quiere más picante se le añade y ya".

El nuevo local sito en la ronda histórica de Sevilla dispone de dos espacios diferenciados, uno con mesas altas y otro con mesas convencionales. Le confiere personalidad al remodelado local el guacamayo amazónico que ha pintado en uno de los paramentos el grafitero Kato.

Lime Street Food ofrecerá almuerzos (de 12:30 a 16:30) y cenas (20:00 a 00:00) a diario, los precios son ligeramente superiores a los de Sinaí, pero manteniendo una buena relación calidad-precio, (un ticket medio inferior, pues, al del restaurante Raíces, que ofrecía platos de alta cocina más elaborada), y junto a una carta donde tampoco van a faltar sus conocidas costillas a baja temperatura, tiraditos (11) o los makis acevichados (10), los comensales pueden abrochar la velada con cócteles que van más allá del referencial pisco sour. La cerveza malagueña Victoria prosigue con su implantación en la ciudad y convivirá en el local con otras marcas peruanas.