Cierra la emblemática librería Verbo, ubicada en el antiguo Teatro Imperial de calle Sierpes

La librería Verbo, ubicada en pleno centro de Sevilla, concretamente en la calle Sierpes, no es una librería cualquiera. Este espacio de venta de libros es especial, además de por la actividad que realiza, por el sitio en el que se encuentra: el antiguo Teatro Imperial.

La sala, con más de 100 años a sus espaldas, ha sido durante los últimos siete años la casa de cientos de obras escritas por diferentes autores y autoras, tanto nacionales como internacionales, hasta que en el día de ayer, 19 de febrero, la librería anunciaba su cierre inminente.

En un comunicado emitido a través de sus redes sociales, los responsables del proyecto escribían: “Desgraciadamente y a pesar de todos los intentos que hemos pretendido en estos últimos meses, ninguno ha fructificado y nos ha llegado el momento de empezar a decir adiós a esta aventura librera que allá por 2017 iniciamos en este enclave singular del Teatro Imperial en nuestra ciudad de Sevilla”.

Verbo no solo es una librería. Ha sido, además, un espacio dedicado a la cultura en el que han tenido lugar numerosas charlas y presentaciones de libros a las que han acudido autores como Gómez Jurado, Fernando Aramburu o Mircea Cărtărescu, entre otros.

Conservando su aspecto original, quienes fundaron este proyecto ubicaron las estanterías de la librería alrededor de las butacas del teatro y sobre el escenario, respectando incluso las cortinas de terciopelo que lo tapaban. Esto ha hecho que, a lo largo de estos años, muchas personas entraran no solo a comprar libros sino a admirar el local, protegido para uso cultural por el Plan General de Ordenación Urbanística.

La gentrificación, motivo del declive de estos negocios

Hay muchos motivos que han llevado al cierre de esta librería. Algunos son internos y están vinculados al propio negocio de las librerías independientes y sus dificultades para mantenerse, y otros son externos. En este caso para la librería Verbo ha sido determinante no tener una clientela fija como consecuencia de la despoblación que se está dando en el centro de las ciudades y que forma parte del proceso de gentrificación de las mismas.

El aumento exponencial de alquileres turísticos y, por consiguiente, el traslado de los residentes de estos barrios a otros lugares ha traído, como consecuencia, una afluencia de turistas que forman parte de una población itinerante con la que es imposible generar un vínculo.

A pesar de las dificultades que venían atravesando en Verbo, especialmente desde hace un año a esta parte, quienes estaban al frente del proyecto han tratado, por todos los medios, salvar la librería.

Ya en Navidad se compartió a través de las redes sociales que este espacio estaba en una situación crítica, por lo que se animaba a todo el mundo a apoyar el proyecto comprando libros. Sin embargo, el problema estructural por el que atraviesan las librerías independientes así como otros negocios pequeños y la falta de apoyo por parte de las instituciones, como acusan, ha hecho imposible evitar el cierre de Verbo.

Liquidación de sus libros

Desde que ayer anunciaron su liquidación, la plantilla de trabajadores de Verbo quedó prácticamente disuelta. No obstante y tal y como han informado, la librería permanecerá abierta de lunes a miércoles en horario de 17:30 a 20:00 horas, y de jueves a sábado de 11:00 a 14:00 horas y de 17:30 a 20:00 horas, con un descuento en todos los libros del 5%.

Pese a la noticia, desde la librería Verbo están profundamente agradecidos a Sevilla en general y a su clientela en particular por todo el apoyo que les han brindado y por el cariño recibido, especialmente en estos momentos tan difíciles. No han querido dejar atrás a las editoriales y a los autores y autoras con los que han podido compartir los siete años de proyecto.

En su comunicado de cierre quienes han estado al frente de la librería se despiden con la siguiente cita de Marcel Proust: “Mientras la lectura sea para nosotros la iniciadora cuyas llaves mágicas nos abren a nuestro interior la puerta de estancias a las que no hubiéramos sabido llegar solos, su papel en nuestra vida es saludable”.