La alergia: ¿cómo combatir sus síntomas con alimentos y ejercicios?

Llegó la primavera y en el ambiente se respira mucho más que alegría. La alergia acecha y con ella sus incómodos síntomas de congestión nasal, estornudos y picor de ojos propios. Librarse de ellos no es fácil pero una alimentación adecuada y una serie de ejercicios puede ayudar a sentirse mejor.

"Una dieta saludable juega un rol fundamental en el control de los síntomas de las alergias. Es recomendable tomar ciertos alimentos meses antes del comienzo de la primavera y seguir haciéndolo durante la temporada de alergia. Sin embargo, hay que tener en cuenta que estas sugerencias no sustituyen los tratamientos recetados por los médicos especialistas, pero sí suponen un buen complemento", explica Pilar Vela, wealthy expert del hotel Royal Hideaway Sancti Petri.

Frutas y verduras

Pilar Vela aconseja comer alimentos ricos en vitamina C, presente en muchas frutas. En concreto, "los cítricos, el kiwi, las fresas o las frutas silvestres son buenas opciones gracias a su efecto antihistamínico".

Sugiere ingerirlos en forma de smoothie combinándolos con verduras de hojas verdes que aportarán también vitamina B.

Pescado

Para aliviar los síntomas, la experta asegura que "es beneficioso incluir en la dieta alimentos ricos en omega 3 como el pescado azul". Y es que este tipo de ácidos grasos, que también podrá encontrar en productos como nueces y semillas, contienen un efecto antiinflamatorio que previene la aparición del asma.

Lácteos

Otro consejo para protegerse frente a este tipo de patologías es incluir en la dieta yogures y otras leches fermentadas que "ayudarán a regular la flora intestinal y te defenderán frente a los ataques externos".

Ejercicios como yoga o pilates

Disciplinas como el yoga y el pilates, que ayudan a controlar la respiración, pueden resultar muy beneficiosas para mitigar los problemas de asma provocados por las alergias primaverales.

En especial, se recomienda repetir esta técnica de respiración todas las mañanas tres veces: "Sitúate de pie frente al sol y junta las manos en círculo con los brazos estirados hacia abajo. Inspira llenando suavemente los pulmones de aire mientras elevas los brazos sobre la cabeza, manteniendo el círculo formado por las manos, y retén el aire durante tres segundos. Para terminar, exhala lentamente por la boca mientras bajas los brazos dibujando un círculo alrededor de ti para volver a la posición inicial".