Sevillalandia, el mayor parque de ocio familiar, vuelve a Fibes esta Navidad a precio de saldo

Uno de los atractivos de la Navidad para las familias regresa el próximo mes de diciembre coincidiendo con las vacaciones escolares: Sevillalandia vuelve tras el año de vacío por la pandemia en 2020 y lo hace con mucha fuerza. El parque de ocio familiar elige de nuevo Fibes para desplegar 23.000 metros cuadrados de diversión para toda la familia, siendo el mayor parque de ocio cubierto del país. Sevillalandia estará abierta del 18 de diciembre al 4 de enero (cerrando únicamente los días de Nochebuena y Nochevieja).

Las entradas se han puesto a la venta este viernes 1 de octubre y ya se pueden adquirir a través de su página web (sevillalandia.com). Y si se compran de forma anticipada, se ofrece a los usuarios un 30% de descuento. La rebaja será de un 50% en el caso de los adultos y niños con diversidad funcional, al igual que para los mayores de 65 años.

Sevillalandia 2021

En la edición de 2021 habrá grandes clásicos de los parques de atracciones como el barco vikingo, la olla o el canguro. Pero también habrá espacio para los más aventureros con un rocódromo con 8 metros de altura o la tirolina, que tiene 120 metros de longitud. La zona deportiva ofrecerá espacio para deportes como el baloncesto o el hockey, y para los amantes de las fantasías virtuales, un área con videojuegos para todas las edades.

Además, se ofrecerán otras actividades entre las que destacan multitud de hinchables y talleres como papiroflexia, manualidades o pintura. Y animaciones, espectáculos, un gran pasacalles y una exposición de Playmobil. Para los que busquen la suerte, habrá sorteos y juegos de destreza como el lanzamiento de dardos o la pesca de patos.

Habrá un espacio dedicado a la ilusión. Una fortaleza en la que los niños podrán escribir su carta a los Reyes Magos y una carpa real en la que podrán entregarle la misiva al paje de Sus Majestades. Para terminar con la magia, habrá que mirar hacia arriba y disfrutar de la tirada de nieve artificial que deja a los más pequeños con la boca abierta.