Abacerías de Sevilla con esencia en las que disfrutar de un buen vino, queso o tapas caseras
Una experiencia gastronómica que permite al visitante conocer la Sevilla más pura y tradicional
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El término abacería según el diccionario de la Real Academia Española es todo aquel puesto o tienda donde se vende al por menor aceite, vinagre, legumbres secas, bacalao, etc. Estos locales siguen existiendo a día de hoy pero se les ha añadido una barra para que los clientes puedan degustar algunos de sus manjares en forma de tapas o montaditos.
Sevilla sigue contando con numerosas abacerías, algunas mantienen la estética y el alma de lo que eran antiguamente y otras se han vuelto más sofisticadas pero para gustos, colores. Lo importante es disfrutar de la carta que tienen y del entorno privilegiado que aportan y transportan a otra época.
Antigua Abacería de San Lorenzo
Este local nació en 1995 con la misión de rescatar el concepto de abacería. Los clientes pueden comprar todo tipo de productos derivados de la harina y otras legumbres y a la vez disfrutar de una amplia carta que ofrece guisos y potajes que recuerdan a la cocina más tradicional y casera, además de productos como lomo a la sal, pavías, papas con langostinos, mechada con tomate y una gran variedad de huevos servidos de diferentes maneras. Todo ello regado con una gran carta de vinos. De 10:00 a 12:30 también se puede desayunar en este lugar. ( C/ Teodosía, 53)
Abacería JM
Este local ubicado en pleno centro de Sevilla ofrece a los clientes desde desayunos hasta cenas. Tienen una amplia carta repleta de cocina tradicional para deleitar a todos los que se sientan a probar un bocado. En su interior se vislumbra ese negocio tradicional donde se pueden adquirir productos como quesos, conservas para degustarlos en casa. No obstante han querido apostar también por la cocina casera para llevar y tienen una pizarra con los platos que tienen para que los clientes que lo deseen puedan disfrutar de la cocina tradicional en la comodidad de su hogar. (San Pablo , 15)
Casa Moreno
Este negocio ubicado en la calle Gamazo es un clásico de Sevilla donde la conserva es la gran protagonista. Este local destaca por su estética y por su gastronomía, en su interior se pueden deleitar con paredes repletas de fotografías de Semana Santa y del mundo del toreo. Los clientes podrán degustar montaditos de picante con cabrales, tortilla de diseño o patamulo, entre otras muchas delicias. Desde primera hora de la mañana los que quieran coger fuerzas para empezar el día pueden pedir bocadillos de tortilla con queso o chorizo picante. (C/ Gamazo, 7)
Casa Palacios
Este emblemático local lleva en pie desde 1926 en el barrio de El Porvenir. Este comercio de alimentación de ultramarinos finos y bar ofrece a sus visitantes la estética de los años 20 con la calidad y el buen gusto de los herederos de este negocio que quieren honrar su pasado y dar el mejor servicio y calidad a sus vecinos. En su carta hay tapas y raciones de boquerones en vinagre, salchichón ibérico a tacos, banderillas de atún con queso. Los montaditos irresistibles de caña de lomo ibérica, carne mechada con mojo picón, lomo al jerez con queso y los panes de la casa deleitan a todo aquel que cruce su puerta. Por supuesto, tienen productos para llevar. (C/Progreso,7)
Antípodas
Este local ha querido darle un giro a la clásica abacería aunque mantiene los productos imprescindibles que deben estar presentes en este tipo de locales como el cerdo ibérico de bellota, los chicharrones (frito y de Cádiz), montaditos, guisos y conservas. En su carta hay tanto tapas frías como ensaladilla o tomate con melva como tapas calientes como brochetas de pollo yakitori, costillas glaseadas con papas arrugas, pasando por guisos como posto con huevos y codorniz o albóndigas de choco y gambas, entre otros. (Chaves Nogales s/n, esquina con Fuenteovejuna)
Maestro Marcelino
Este rincón sevillano es sin duda famoso por su jamón. Se pueden ver colgados y degustarlos con unas tapitas en el momento. Todo lo que hay en el local se puede llevar a casa, así que si está lleno y no se quiere esperar puede ser la solución más práctica. De su carta destacan los embutidos y las conservas aunque también deleita a los clientes con tapas como torta de Inés Rosales con salmón y guacamole, torta de Inés Rosales con pisto verde y queso fundido. Los amantes de los montaditos tendrán una gran variedad para elegir, también ofrecen aliño de pimientos asados con atún o lomo de Orza. (C. Hernando Colón, 9)
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