El Zaguán de Carlos Navarro Antolín, con Laura Robles

Empresaria y ciudadana comprometida. Laura Robles (Sevilla, 1967) lleva desde los 17 años en los fogones con especial dedicación a la repostería. Hija del inolvidable Juan Robles (1935-2021), maestro de hosteleros, ha alcanzado un alto nivel en la elaboración del plato estrella que remata cualquier celebración. El pasado octubre se encargó de preparar, por ejemplo, el postre del almuerzo que la Cámara de Comercio ofreció en honor de Felipe VI en el Real Alcázar con motivo de la entrega al monarca del Premio Extraordinario Iberoamericano Torre del Oro.

¿Cómo ha evolucionado el postre en los últimos cuarenta años en la hostelería andaluza? ¿Por qué la Semana Santa tiene su repostería y la Feria carece de un dulce propio? ¿Qué fue de aquel postre, conocido como el pijama, que se ofrecía en las cartas reducidas de los establecimientos de los años setenta? ¿Es cierto que se adulteran las torrijas a base de reducir la miel? ¿Cuál es el sabor por antonomasia de una ciudad como Sevilla? ¿El sevillano es goloso? Hablamos de repostería de alta calidad, de sabores y, cómo no, del perfil de una sevillana que, además, saca tiempo para ejercer de vicepresidenta de Manos Unidas, la ONG de la Iglesia Católica que capta fondos para ayudar al Tercer Mundo.