La playa más pequeña del mundo está en España y tardarás un minuto en recorrerla
Esta playa se se formó como resultado de la erosión del mar Cantábrico, creando una serie de cuevas y canales subterráneos
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Las playas pequeñas son auténticos tesoros escondidos que tienen la capacidad de ofrecer una experiencia más íntima y acogedora. A pesar de su tamaño compacto, las playas pequeñas tienen mucho que ofrecer en términos de belleza natural y encanto. Desde su atmósfera tranquila y relajante hasta sus paisajes pintorescos y aguas cristalinas, estas playas son perfectas para aquellos que buscan escapar del bullicio y disfrutar de un entorno sereno.
Y si hablamos de playas pequeñas, tenemos que hacer mención a la que es considerada como "la playa más pequeña del mundo" que por suerte para los españoles se encuentra en nuestro país y se puede tardar un minuto en recorrerla andando de punta a punta.
Su nombre es "Gulpiyuri" y es una pequeña joya natural ubicada en la costa de Asturias, España. Lo que hace que esta playa sea única es que no está conectada directamente con el océano Atlántico, a pesar de su ubicación costera. En cambio, Gulpiyuri es una playa interior, situada aproximadamente a 100 metros tierra adentro.
Gulpiyuri se formó como resultado de la erosión del mar Cantábrico, que creó una serie de cuevas y canales subterráneos. Estos canales permiten que el agua del mar se filtre a través de ellos y forme una especie de piscina natural en la costa. De esta manera, la playa se alimenta del agua subterránea y las olas rompen en la cueva subterránea, creando una sensación única de playa aislada.
La playa de Gulpiyuri cuenta con tan solo unos 50 metros de longitud, pero su belleza y singularidad la convierten en un lugar muy visitado por los turistas. El entorno que rodea la playa está formado por acantilados cubiertos de vegetación, creando un paisaje impresionante y pintoresco.
Debido a su pequeño tamaño, la playa puede llenarse rápidamente durante los meses de verano, por lo que es recomendable visitarla temprano en la mañana o durante días de semana para evitar las multitudes. Además, el acceso a la playa se realiza a través de un camino y una escalera desde los acantilados, por lo que puede ser necesario caminar un poco para llegar allí.
Gulpiyuri es un lugar ideal para disfrutar de la belleza natural y la tranquilidad de la costa asturiana. Las aguas son cristalinas y tranquilas, lo que permite nadar y relajarse en un entorno mágico. Sin embargo, es importante tener en cuenta que no hay servicios como baños o restaurantes directamente en la playa, por lo que es recomendable llevar todo lo necesario para una visita cómoda.
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