Todo no es la playa: cinco destinos rurales en Andalucía para pasar el verano
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La playa es sinónimo de verano, no es necesario que vengamos nosotros a recordárselo al lector. Sin embargo, es conveniente hablar sobre esos otros destinos posibles, comunidades rurales que por carecer de playa parecen ser menos atractivos en verano. Para nada. Y esta selección de cinco destinos rurales en Andalucía es prueba de ello. Coge papel y lápiz y elige cuál será el próximo que guíe tu camino.
Olvera (Cádiz)
La sierra de Cádiz esconde uno de esos pueblos en los que es fácil enamorarse y mucho más difícil dejar atrás. Perteneciente a la increíble ruta de los Pueblos Blancos, Olvera posee, según palabras de su propio ayuntamiento, “una ladera de casas encaladas y callejuelas erigida entre olivares y coronada por un exuberante conjunto monumental”. Podemos organizar una visita guiada al Castillo de Olvera, una impresionante fortaleza medieval, dejarse embaucar por la Reserva natural del peñón de Zaframagón o acudir al Peñón del Cerretillo, mirador desde el que poder disfrutar de una de esas panorámicas que quitan el aliento.
Zuheros (Córdoba)
Nos repetimos mucho, pero no deja de ser cierto: Zuheros es, nuevamente, uno de los pueblos más bonitos de toda España. Se encuentra a unos 76 km de la capital y cuenta con tan solo 700 habitantes. De nuevo, nos esperan callejuelas empinadas y casas encaladas y atracciones turísticas como la cueva prehistórica de los Murciélagos, el Castillo de Zuheros o la ruta del río Bailón. Además, en torno a mediados de agosto, el pueblo se viste de fiesta para celebrar sus fiestas patronales en honor a la Virgen de los Remedios. Qué mejor época para visitar este enclave de la sierra de la Subbética.
Almonaster la Real (Huelva)
En el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche se encuentra Almonaster la Real, un pueblo de aproximadamente 600 habitantes que, además, alberga 14 aldeas diseminadas por sus alrededores. El pueblo está declarado Conjunto Histórico - Artístico y posee la única mezquita conservada en el medio rural de la Península Ibérica. Una manera efectiva de poder contemplar este tesoro de nuestro país es acudiendo al cerro de San Cristóbal, a 900 metros de altura.
Setenil de las bodegas (Cádiz)
Un pueblo blanco rodeado de cuevas majestuosas y en el que podremos visitar desde ermitas singulares hasta un torreón y aljibe árabes, las ruinas romanas de Acinipo, que alberga un teatro muy bien conservado, o disfrutar en octubre de sus míticas fiestas de Moros y Cristianos. Por supuesto, desde Setenil podremos trazar numerosas rutas naturales, así como dejarnos maravillar por sus casas construidas en el interior de las cuevas.
Osuna (Sevilla)
Somos conscientes del calor sevillano, pero no podíamos dejar la oportunidad de resaltar los valores de un pueblo tan bonito como Osuna, que cuenta con un patrimonio arquitectónico y artístico que deja con la boca abierta. Entre ellos, destaca la antigua Universidad de 1548, el Palacio Marqués de la Gomera o la Colegiata, con vistas panorámicas del pueblo.