Eduardo Canorea pide a las figuras "volver a la cordialidad"

El empresario Eduardo Canorea, que junto a Ramón Valencia comanda la empresa Pagés, pide "volver a la cordialidad" a los diestros Morante de la Puebla, El Juli, Manzanares, Perera y Talavante, tras las descalificaciones que vertió en una reunión con informadores de varios medios de comunicación de Sevilla. Los cinco diestros enviaron el pasado viernes un comunicado conjunto a la prensa y a la Real Maestranza -propietaria del inmueble-, en el que aseveraban que no torearán en Sevilla entre tanto gestione el coso la empresa Pagés. Canorea había dicho de ellos: "¿Dónde están Manzanares, Julián López, Morante, Talavante, Perera?...Alguno en el limbo, otros en la parra y otros más allá del limbo y la parra" y calificó de "mandaos" a los representantes de su gremio -Juan Diego, El Fundi y Gómez Escorial-.

Eduardo Canorea, por la misma vía que los toreros, a través de un correo electrónico a las redacciones y que encabeza dirigiéndose a los "Sres. Morante de la Puebla, Manzanares, Juli, Perera y Talavante", afirma lo siguiente:

"Estas líneas son para dejar muy claro que lo expresado por mí ante la prensa sevillana el pasado 27 de noviembre no fue más que mi idea de los males que aquejan el presente de la Fiesta y la importancia de que fueran ustedes, personalmente, los que estuvieran presentes en el necesario diálogo con los empresarios y demás sectores, en lugar de unos señores matadores de toros que ya no ejercen la profesión, cuyas personas son tan respetables como las suyas y la mía.

Al referirme a ustedes en este encuentro con la prensa, mostré mi admiración por sus exitosas carreras; esto está grabado y si no lo transmitió la prensa será debido a problemas de espacio. Sólo di mi opinión y nada más. Respeto profundamente sus personas y su oficio. Por otra parte, la familia Pagés-Canorea lleva más de ochenta años al frente de la Plaza de Toros de Sevilla y siempre ha cumplido todos sus compromisos y obligaciones con todas las partes que ha tenido que tratar, sin excepciones, y lo ha hecho desde la consideración a todo el mundo. Esta trayectoria también merece respeto.

Los tiempos que corren son difíciles y la Fiesta lo está pasando mal, por eso les hago sentidamente un ruego: volvamos a la cordialidad que ha presidido nuestras relaciones hasta aquí y procuremos estar a la altura de las circunstancias.

La empresa Pagés quiere dejar claro que la Plaza de Toros de Sevilla tiene sus puertas abiertas para todos ustedes. La afición lo merece y la Fiesta lo necesita.

No quiero concluir sin decir que debí haber dejado el Senegal para los senegaleses; discúlpeme José Tomás. Ha sido una expresión desafortunada".

Como apuntábamos ayer en estas páginas, todavía queda tiempo hasta el Domingo de Resurrección y el euro es el euro, por lo que todavía cabe un acercamiento, como el empresario pide a los toreros para que la temporada en Sevilla no se vea perjudicada. Lo contrario sería muy perjudicial, incluso para el devenir de la Fiesta.

El comunicado cierra el segundo capítulo tras el primer desencuentro antes de un invierno que se prevé caliente entre el sector empresarial taurino y los toreros.