Las tertulias de verdad de José Luis Garci
Paseo por RTVE.es
'Qué grande es el cine' fue un excelso recorrido por las mejores obras del séptimo arte entre 1995 y 2005
En Qué grande es el cine se fumaba bastante. Pero se hablaba todavía más. La tertulia cinéfila orquestada por José Luis Garci a través de su productora Nickelodeon nos regaló, durante una década, entre 1995 y 2005, verdaderas lecciones de análisis y crítica cinematográfica a través del diálogo sosegado entre los tertulianos de cada entrega.
En la web de RTVE se pueden ver 47 entregas en las que el esquema siempre es el mismo. La presentación dura alrededor de un cuarto de hora en el que Garci contextualiza la película en el año en que se estrenó y otros datos fundamentales de cada título. Tras la proyección de la película en antena tiene lugar un coloquio al que asisten tres invitados a los que podemos seguir durante 45 minutos. Llegados a ese punto, ellos continuarán en lo suyo, pero el realizador Bustos introducirá los títulos de crédito del programa y fundirá a negro.
La clave de Balbín tenía el cine como pretexto. La película apoyaba un tema de debate para el resto de la noche. Garci fue mucho más lejos y planteó la primera tertulia cinéfila de verdad en TVE. A la que, valga como anécdota, tardaron en entrar mujeres. Aunque lo hicieron, y con mucha fuerza, con voces como las de Maruja Torres y Clara Sánchez.
Los nombres de Pedro Miguel Lamet, Eduardo Torres Dulce, Juan Cobos o Miguel Marías dictaban sentencias con cada una de sus intervenciones. Y no está de más regresar a estos programas con actitud humilde, porque se aprende mucho. Entre los coloquios a los que tenemos acceso encontramos títulos de clásicos indiscutibles. No hay paja. Están Casablanca, El maquinista de la general, Cantando bajo la lluvia, Carta a una desconocida, Matar a un ruiseñor, Strómboli, El evangelio según San Mateo, 2001, una odisea del espacio o Breve encuentro.
Durante un año el programa se consagró al cine español. En la web están los coloquios de Calle Mayor, Amantes y Mi querida señorita. Es curioso hacer el ejercicio de comparar estas tertulias cinéfilas que se extinguieron hace 14 años con las que a duras penas se emiten hoy en la madrugada de los viernes, y sacar conclusiones.
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