La ventana
Luis Carlos Peris
Perdidos por la ruta de los belenes
Homenaje
Raffaella Carrá desde pocos días después de su fallecimiento hace un año tenía reservado un rincón de Madrid para que luciera su nombre. Hoy se ha inaugurado, con el azulejo que rotula su memoria y homenaje en la céntrica calle Fuencarral, en el barrio de Chueca.
La plaza dedicada a la fallecida artista italiana, un icono pop y que simboliza el aperturismo en España con sus programas en TVE durante los años de la transición, se encuentra en un espacio abierto de dicha calle junto al antiguo mercado y que ahora es una macrotienda de deportes. Estaba pendiente el azulejo que se ha descubierto con motivo del inicio de las fiestas del Orgullo 2022 (MADO es su acrónimo) y que cuenta en la tarde de este miércoles con el pregón que pronuncie la eurovisiva Chanel. En su intervención estará apoyada por el equipo de baile que la respaldó en SloMo y por los compañeros del musical Malinche, de Nacho Cano, que se estrenará en septiembre en Madrid.
Nacida en Bolonia, ciudad donde se la idolatra, Raffaella María Roberta Pelloni, tras formarse en voz y baile, inició una carrera cinematográfica que la llevó a Hollywood y dio calabazas a Frank Sinatra. Rodó en nuestro país algunos westerns almerienses y se convirtió a finales de los 60 en una estrella de la RAI, con espacios musicales y de entretenimiento junto Lelio Luttazzi. En 1974 aparecía en el Señoras y Señores de TVE dirigido por Valerio Lazarov que le abrieron la puerta a sus noches temáticas, La hora con..., donde se convirtió en emblema de las canciones veraniegas cuando España se asomaba a la democracia. Fue tan querida en España como en Italia y sus canciones sonaron (y se siguen bailando) durante lustros. A principios de los 90 regresó a TVE para el espacio nocturno Hola Raffaella, donde fue descubierta por los más jóvenes de entonces. Colaboró en distintos especiales, como el del 60º aniversario de TVE, en 2016, su último espacio presentado en España.
La placa con la efigie de Raffaella Carrá sigue el estilo de la rotulación de las calles del casco histórico madrileño. Un rostro pintado por Ángel García Pinto inspirado en una foto de la italiana a principios de los años 80 que ha recibido algún comentario negativo.
En el acto con representantes de todas las formaciones municipales madrileñas ha estado el embajador de Italia en España, Riccardo Guariglia que valora de su paisana haber dejado "una huella indeleble en la memoria de cada italiano y creo que también de cada español, a la vez que ha sido un puente y una embajadora".
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