"Es una maravilla que la Cultura por 'El Ministerio' sea 'trending topic'

Vive un buen momento que se ve reflejado en el papel de Irene Larra en El Ministerio del Tiempo, que ha ganado en presencia, tramas y también en significado en la serie de los martes de La 1.

Cayetana Guillén Cuervo (Madrid, 1969) es uno de los rostros reconocidos de La 2, entre Versión española, que ha cumplido 22 años en antena, y la revista cultural Atención, obras. La actriz es imagen de Espresso 43 y hace balance para este periódico de estas temporadas en la cadena pública.

–Comienzo preguntando por su madre, Gemma Cuervo ¿cómo está?Aún tenemos que reconocerla como se merece por la película El mundo sigue.

–Gracias por preguntar por ella. Mi madre está muy bien, con muy buena actitud. Sana y contenta. Me encantaría realmente que le dieran un premio por El mundo sigue, te tomo la palabra. Espero que puedan organizarlo y que mi madre se lleve su premio por ese personaje maravilloso que es una de las grandes películas de Fernando Fernán Gómez.

–Lo vivido por usted en estos años no es casualidad, pero denos su visión.

–Efectivamente, lo vivido por mí no es casualidad. Le pongo a todo muchísimo esfuerzo, mucho empeño, muchas ganas de trabajo, mucha perseverancia… Yo sólo creo en resultados de éxito con esfuerzo detrás. Lo demás está cogido con pinzas y el tiempo acaba por soplarlo y tirarlo al suelo. Así que recojo frutos de muchas horas de esfuerzo y con un equipo detrás que también trabaja conmigo para que eso salga bien.

–¿Cuál es su impresión de esta nueva temporada de El Ministerio del Tiempo?

–Esta cuarta temporada de El Ministerio del Tiempo es la mejor de todas. La serie está absolutamente madura, está teniendo un fenómeno transmedia brutal: los finales de los capítulos, los guiños históricos. En internet tienen más de 2 millones de visitas y se hace trending topic con Velázquez, Clara Campoamor, Lorca. Yo creo que es una maravilla que por esta serie la Cultura sea trending topic en las redes sociales. El Ministerio del Tiempo es puro servicio público y está muy bien que la televisión pública apueste por ello. Hay que tener muy en cuenta la audiencia social y no solamente la audiencia convencional.

–¿Seguiremos viendo a Irene en nuevas temporadas? ¿Qué le parecería una secuela?

–No sé si habrá nuevas temporadas de El Ministerio del Tiempo, pero si las hay yo creo que Irene siempre va a estar ahí. Tengo la sensación de que los creadores han decidido que Irene Larra es fundamental y se está viendo en esta temporad, así que estoy muy contenta. ¿Una secuela? Pues, me encantaría. Una secuela de Irene viviendo en Chueca y haciendo su vida sería una maravilla.

–¿Se quedaría en una época si usted pudiera abrir una determinada puerta de su Ministerio?

–A mí me gusta vivir en el siglo XXI y no podría irme y dejar a mis amigos, a mi familia. Pero me gustaría fisgar en, por ejemplo, la época de la Residencia de Estudiantes, con Las Sinsombrero: esas mujeres republicanas tan modernas, que asentaron las bases de derechos y libertades de los que nosotros disfrutamos… Me gustaría, esa época me gustaría verla en vivo.

–¿Le ha abierto esta serie una puerta en otros países que no se esperaba?

–Es que al estar en Netflix internacional y ahora en HBO pues se puede ver en todos los países, ¿no? Y eso es una maravilla, ver cómo en los directos que hago en Instagram por ejemplo entra gente de Chile, de Argentina, también de Costa Rica, de Brasil… Eso es fantástico, realmente. Ojalá que me salgan proyectos por allí.

–En sus programas de La 2 ha aprendido como nunca ¿verdad?

–Realmente mis programas de La 2 son una oportunidad para seguir estudiando sin parar y así lo hago. Sigo aprendiendo mucho a través de los personajes a los que entrevisto y a través de todo lo que tengo que ver para hacer tanto Atención, Obras como Versión Española.

–¿Yqué autor o compañero de profesión le ha impresionado descubrir en esos formatos culturales?

–Por estos programas pasa todo el mundo. Realmente tenemos la confianza de la gente que confían en el criterio de estos espacios de TVE. Date cuenta de que ha pasado la excelencia de la cultura y no podría dar un nombre o dos. Pero bueno, a lo largo de estos años ha habido encuentros maravillosos como Fernando Fernán Gómez con Almodóvar, por ejemplo. Son de esos programas que se me han quedado en la retina. Y por supuesto, Berlanga, Rafael Azcona, Antonio López. La gente más importante de nuestra cultura ha pasado por estos programas, pero me parece injusto dar unos nombres y no dar otros.

–¿Le gustaría probar en algún formato en concreto, o en algún tipo de serie?

–Me siento muy cómoda haciendo directos de Instagram, que los trabajo como formatos de televisión: metiendo vídeos. Estoy investigando todo el rato con mi chico [su marido, el fotógrafo Omar Ayyas] que esos directos sean como pequeños programas… Por ejemplo, los encuentros de la mano de Espresso 43 han sido una maravilla. Porque los he ido perfeccionando y son realmente pequeños programas que el público los puede consumir cuando le dé la gana y desde el móvil.

–Nuevas reglas en la comunicación que conlleva también más libertad para el espectador.

–Esos vídeos están colgados en mi Instagram TV, puedes acceder a ellos y puedes decir: “Me interesa el directo de Asier Etxeandía”, “o el de Marta Sánchez” o, “me interesa el directo de Okuda San Miguel”… Vas a ellos y los tienes ahí, colgados para siempre. Puedes documentarlo como un programa y me parece una fórmula que me encanta porque soy yo misma, desde mi casa y lo hago como me da la gana hacerlo ¿no? Con absoluta libertad. Y eso es una cosa maravillosa para el comunicador. Yo siento que aporto mucho más si me dejan hacer lo que yo quiera.

–Se perfeccionó en la cocina con MasterChef ¿cómo es usted como anfitriona?

–Mi velada ideal es en mi casa. Habiendo cocinado yo y compartiendo la cocina con mis amigos. Me encanta por ejemplo levantarme un sábado temprano, cocinar durante la mañana y que vengan ellos luego a comer y quedarnos de sobremesa. Me gusta atender yo y que no se levante la gente a ayudarme para que no se rompa la tertulia. Y yo me levanto, yo recojo, para quedarnos charlando durante mucho rato.

–Monte una sesión de cine con un millón de amigos. Haga una cartelera para la desescalada.

–Yo pondría Manhattan y Annie Hall de Woody Allen; Esplendor en la hierba de Elia Kazan; Herida, de Louis Malle. A lo mejor también añadiría películas que nos marcaron de niños como ET, Grease, Regreso al futuro, Atrapado en el tiempo… Luego pondría la trilogía de El Padrino, La La Land (que es un musical que me encanta), Green Book, El Verdugo, El extraño viaje y El mundo sigue. Bueno, estoy diciendo películas que no son esencialmente actuales pero que me provocan más nostalgia, ¿no?

–Brindemos. Denos esa receta para después del postre.

–El Espresso 43 es todo un descubrimiento para mí, para un momento de placer: una copa con hielo, un chorrito de Licor 43 y un café espresso. Es un momento dulce, relajado y que tengo la sensación de regalarme de esta forma.