Rosalía, las uñas y una tarjeta platino

Había interés en la audiencia joven por ver a Rosalía en su primera aparición en un espacio de gran consumo del prime time. La cantante-cantaora catalana venía de triunfar en la noche de la MTV, descubierta por medio mundo, y se había merecido aparecer en ElHormiguero antes.

Y en días como en ese esperado debut de una joven artista que ha demostrado mucho en poco tiempo surgen las carencias de PabloMotos, que no termina de enfocar bien sus charlas. El valenciano dedicó más tiempo a las uñas de sus invitada que de indagar en su universo personal y buscar unas opiniones de mayor calado de un prodigio que se barrunta como la revolucionaria del flamenco.

Rosalía estaba dispuesta a agradar, lanzó incluso su voz a capella, y hasta se tomó en serio las preguntas de Trancas y Barrancas sobre Eurovisión (ya veríamos) y llevar el inglés al flamenco (que lo tendrá planteado). Rosalía no es el típico actor limitado que sólo puede brindarse como espectáculo.

Tuvimos que aguantar de nuevo lo del monstruo, interrumpiendo lo que podía haber sido una conversación interesante. ¿No había intención o no había confianza en lo que pudiera contar la invitada?

Y para colmo aparecieron Dani Martín, con tarjeta platino de bula, y David Broncano a chafar una noche esperada convertida en caos. No estuvieron finos. Ni bebiendo plástico.