'Planeta Calleja' vuelve al domingo de Telecinco con Kiko Rivera
Expectación para la audiencia
Mediaset estrena la entrega del aventurero leonés con el hijo de Isabel Pantoja y que concluyó con problemas para salir de Nepal
En plena reacción para recuperar cuanto antes el primer puesto en las audiencias que ha tomado Antena 3, Telecinco se queda con las mejores entregas de Planeta Calleja, espacio de Cuatro. Tras el especial con Saúl Craviotto el pasado domingo desde La Palma, mañana a las diez de la noche se estrena el viaje grabado por el leonés junto a Kiko Rivera, que recorrieron lugares paradisíacos de Nepal, y que concluyó por problemas por asuntos del covid en la pasada primavera.
Telecinco ofrece este programa entre otras razones por las confesiones de mala relación que tiene Kiko con su madre, Isabel Pantoja, un contenido de interés para el público habitual de la cadena de Mediaset. Un error burocrático sobre las horas en las que tenía que haberse realizado la PCR para viajar desde Nepal obligó al equipo de Planeta Calleja a quedarse un día más en el país asiático, como reflejará la entrega.
El expedicionario asegura que nunca tuvieron miedo en las grabaciones en esta pasada temporada con las restricciones. “Teníamos más precauciones, pero no miedo. Escogíamos los países más limpios de covid y no hemos tenido problemas". "Esa situación ha contribuido a que “en este año las conversaciones han sido más intensas, más curiosas y emocionales", añade.
Fue durante el viaje con Kiko Rivera a Nepal cuando se llevaron el mayor susto susto. “En Nepal sí que nos saltó una alerta, porque solo en una semana se dispararon los casos por su cercanía a India. Vimos cómo quemaban a los muertos, estuvimos confinados en el hotel, un horror. Tuvimos que adelantar las fechas y rodar más rápido. Al día siguiente de nuestro regreso a España, cerraron el país", recordó el director y conductor de Planeta Calleja.
La ruta de Kiko Rivera y Jesús Calleja
Kiko y Jesús comienzan la aventura en Swayambhunath, el Templo de los Monos de Katmandú. Desde allí se desplazan al río Trishuli para hacer un rafting que Kiko califica como “la mayor experiencia de mi vida hasta el día de hoy”. Los rápidos de la bajada provocan incluso que salga despedido de la lancha y acabe flotando en las aguas heladas que bajan del Himalaya, pero el incidente no impide que disfrute al máximo de la actividad.
En el Parque Nacional de Chitwan, Kiko vive una experiencia íntima con elefantes, acompañándoles en su paseo diario y bañándose con ellos. Debido al repentino confinamiento del país por la pandemia, Kiko y Jesús se ven obligados a regresar a Katmandú y concluir el viaje en Pashupatinath, el lugar sagrado donde los nepalíes queman a sus muertos, donde Kiko quedará profundamente impresionado.
También te puede interesar