Jordi Cruz desconfía a estas alturas de Pepe Rodríguez

¿Jordi Cruz ha perdido la confianza en Pepe Rodríguez, tras tantos años de MasterChef? Hay momentos en que sí. Pero, claro, estamos hablando de un talent donde todo es posible en pro de los audímetros. ¿Es capaz el chef de El Bohío salir airoso de una prueba? Ayer le tocaba hacer algo airoso con el queso manchego con la teoría del food paring: el maridaje de productos por proximidad aromática por muy improbable que lo dicte el recetario tradicional.

Jordi puso en duda de que Pepe anoche estuviera a la altura del reto del extremeño Toño Pérez cuyo menú en Atrio es continua experimentación de food paring.

Sin embargo el de Illescas considera al catalán como "a un hijo", uno de sus hijos, criado en años de experiencias, sinsabores y promociones publicitarias (y todo lo demás, clin, clin). Frente a las dudas y el paring, Pepe se puso manos a la obra. ¿Y cómo lo hizo? Como siempre en cada ocasión en que el jurado se pone a prueba junto a los concursanteS. Su plato de queso rebujaba todo lo posible en texturas y elaboraciones y Toño, Samantha y Jordi (faltaría más) aplaudían con las orejas mientras paladeaban el resultado.

Hasta se tomó una copa mientras estaba entre las cacerolas.

En esa prueba final estaban en el cadalso los tres derrotados de la prueba por equipos en WHA, un espectáculo madrileño donde David también dio el espectáculo. Se sintió perder los nervios.

Acabó orillado junto a Claudia y el flamenco-vasco Adrián. Se salvó en el paring porque Claudia se pasó con la sobrasada para su aguacate protagonista y fue la que tuvo que decir adiós este lunes, para pesar de Pepe, que tras su éxito ahora veía que la niña de sus ojos caía en la batalla.

Ella quiere se crítica gastronómica así que ha conseguido arsenal para estrellar a quien haga falta.

Del reto de Toño quien salió con moral extra fue Adrián, que salió escaldado de la doble capitanía pero ha salido impulsado del buen resultado de paring con su lingote de codero, por ahí una seta, una alcachofa, un plátano, granos de café, tomillo.

Junto a Adrián y pese a los nervios de David que, quién sabe de aquí a la final por la presión puede liarla, a la semifinal llegan bien posicionadas María Lo, Verónica y Patricia. Cada una de ellas han sabido remontar y superar adversidades. Han crecido y han aprovechado la formación. Y pese a los defectos como la soberbia mayestática de Verónica, merecen estar en esta gala decisiva del próximo lunes en La 1.