"El Hierro es un lugar muy malo para matar a alguien"

–¿La serie Hierro no se podría contar sin la isla de El Hierro?

–Sin El Hierro sería otra cosa. El universo importa como un personaje. Es un gran telón de fondo. Son lugares asombrosos. El paisaje importa muchísimo para hablar de una comunidad, para explicar de cómo se vive en un lugar.

–Se une lo idílico, con lo paradisíaco y también lo oscuro con lo agreste.

–Hay dos cosas que nos interesaban: en una isla tan pequeña es muy difícil guardar un secreto. Y de allí es difícil salir: es un lugar muy malo para matar a alguien. A la jueza además le cuesta adaptarse porque se ha visto castigada por este destino.

–¿Estamos ante un misterio asumido por unos inadaptados?

–Al personaje de Candela Peña le va a costar integrarse cuando tiene que instruir este caso. Y tenemos al personaje que interpreta Grandinetti, del que todos están convencidos de que es el culpable.

–¿Estos personajes podrían seguir en otro lugar?

–La historia está cerrada. Es una película de 400 minutos, si quieres. Sus personajes podrían estar en otra parte, en una secuela, pero todo eso se me escapa ahora.

–¿Costó demasiado convertir en una realidad Hierro?

–No es tan extraño en este gremio. Fue fundamental que Arte France confiara en el proyecto. Tuvimos la inmensa suerte de que fuera seleccionado en el Festival de Berlín y que despertara intéres internacional. Arte ha mantenido la apuesta y se alinearon los planetas para contar con Movistar +.

–¿No le habría gustado que hubiera cristalizado antes y haber aprovechado la primera remesa de los nuevos tiempos en la ficción española?

–Carezco del espíritu deportivo de ser el primero. Yo ya estoy feliz con que haya salido adelante. Otros proyectos se quedan en el camino. Lo normal es que las cosas no salgan, pero porque hay poco espacio. Aunque ahora hay más operadores y posibilidades.