El doctor García de Almudena Grandes ahora pasa consulta de madrugada en TVE

Los hábitos de los espectadores han cambiado. Hemos cambiado. A qué velocidad. En poco menos de cinco años, con una pandemia de por medio, nada es lo que era. Una serie de lujo como Los pacientes del doctor García, de las que antes llamábamos alto standing, con presupuesto millonario, adaptación de una novela superventas de Almudena Grandes, no ha sido capaz de sobrevivir en el prime time de los miércoles de La 1. Conscientes sus programadores de que sus cuotas de pantalla estaban haciendo la mitad de la media de la cadena, y perjudicando su resultado final, esta semana que acaba se decidieron a dar lo que todos intuíamos desde que se emitió el primer capítulo: los capítulos restantes se emitirán en la madrugada.

El 5% de cuota de pantalla que marcó su primer episodio marcó su destino. Las cifras se fueron repitiendo, colándose algún 4% en el camino. Por mucho que la adaptación de la novela de Almudena Grandes fuese el plato fuerte de la temporada en La 1, a los programadores nos les tiembla el pulso cuando toca realizar movimientos crueles en las parrillas. La cadena, que después de una larga travesía en el desierto bajo la presidencia de José Manuel Pérez Tornero está registrando unas cifras de audiencia más que aceptables, y coqueteando con los dos dígitos (un 10%) en el balance final del mes, no se puede permitir el lujo de arrojar a la papelera el resultado de sus miércoles, a sabiendas de que van a ser desastrosos.

No sé si con mucho o con poco dolor de corazón se impuso la frialdad matemática. Este miércoles, a la hora que tenían que estar en primer plano los pacientes se emitió un largometraje, y la serie de Almudena Grandes entró en la madrugada, donde quedarán defenestrados los capítulos restantes.

Dicen los que saben de esto que los interesados en la ficción ya la han visto completa en Netflix. Dudo que todo el perfil de espectadores a quienes va destinada esta serie cuenten con la plataforma. Pero lo que evidencia esta derrota es que la emisión de seriales de estreno, semana tras semana, en los canales en abierto, va a pasar a la historia. En la televisión lineal triunfan las series diarias, que son las que conectan con el público. Todo lo demás es tirar el dinero.