Petra, una joya del desierto inmortalizada por Indiana Jones

Petra es una de las ciudades más conocidas de Jordania y también una de las más turísticas. Situada en el suroeste del país, es famosa por su impresionante arquitectura tallada en roca arenisca de color rosado y su avanzado sistema de gestión del agua.

Uno de sus enclaves más icónicos es el llamado Edificio del Tesoro (Al-Khazneh), inmortalizado en Indiana Jones y La Última Cruzada como punto final del periplo del arqueólogo encarnado por Harrison Ford y su padre (Sean Connery) para encontrar uno de los objetos más legendarios de la historia, el Santo Grial.

El edificio, y la ciudad de Petra, vuelven a ser estos días noticia por el hallazgo de una cámara subterránea secreta con numerosos artefactos y 12 esqueletos de unos 2.000 años de antigüedad. Uno de esos esqueletos sostenía en sus manos un cáliz que recuerda al que aparecía en la película de Steven Spielberg y George Lucas.

Petra

Fundada en el siglo IV a. C., Petra se convirtió en un importante centro comercial debido a su ubicación estratégica en las rutas comerciales que conectaban Arabia, Egipto y el Mediterráneo.

Esta ciudad de la civilización nabatea fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985 y está considerada una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo.

El Edificio del Tesoro

El impresionante Edificio del Tesoro, que en la película emergía en pantalla tras atravesar los protagonistas el Cañón de la media luna (llamado así en la ficción), fue tallado en la roca arenisca y se cree que fue construido en el siglo I d. C. como tumba para un rey nabateo, aunque su función exacta sigue siendo objeto de debate entre los arqueólogos.

El Tesoro tiene una fachada única, de unos 30 metros de ancho y 43 de alto, con una decoración que incluye columnas corintias, esculturas y relieves que representan figuras mitológicas y elementos de la cultura nabatea. Además, la arquitectura del edificio muestra influencias helenísticas y orientales, lo que refleja la diversidad cultural de la región en ese momento.

Pese a su nombre, el Edificio del Tesoro no albergaba un tesoro en el sentido convencional. La leyenda dice que los nabateos escondieron un tesoro en su interior, lo que llevó a su denominación popular, pero el interior es sencillo y no contiene ningún tesoro real.

Investigaciones y hallazgos en el Edificio del Tesoro

El Edificio del Tesoro en Petra ha sido objeto de diversas investigaciones y excavaciones a lo largo de los años, aunque su interior ha permanecido relativamente inexplorado debido a su diseño y a la falta de acceso.

Sin embargo, algunos hallazgos y estudios recientes han proporcionado numerosa información.

Excavaciones en su entorno inmediato han revelado más sobre la arquitectura y el contexto del edificio, desvelando restos de estructuras cercanas que sugieren que era un importante centro ceremonial y administrativo. En las cercanías se han descubierto artefactos como cerámica, monedas y herramientas que ayudan a comprender mejor la vida cotidiana de los nabateos y su economía.

La fachada del edificio también ha sido analizada con detalle, descubriendo técnicas de construcción y estilos artísticos que reflejan la influencia de diversas culturas, incluyendo la helenística y la egipcia.

Por lo que se refiere al simbolismo de sus esculturas y relieves, podrían estar relacionados con creencias religiosas y prácticas funerarias de los nabateos. Precisamente sobre este último ámbito, el de los ritos funerarios, es sobre el que los expertos esperan aprender tras el último hallazgo en el enclave.