Cinco días para repensar la habitabilidad de las ciudades Patrimonio

La ciudad de Córdoba acoge el XVII Congreso Mundial de la OCPM bajo el lema ‘La Habitabilidad de los centros históricos’. Esta cita supone la fase final de la Hoja de Ruta de Quebec, es decir, la evaluación del trabajo que se ha venido desarrollando en los dos últimos años.

Según la programación ofrecida por la organización, el lunes 23 se ha destinado a que los asistentes puedan tener tiempo para entrar en contacto con la ciudad y acreditarse. El martes se va a realizar una visita turística en la que se les va a ir introduciendo los cuatro ejes estratégicos de la habitabilidad de los centros históricos y que son la base sobre la que se va a trabajar en este congreso. Esta acción permitirá a los participantes encontrarse o conocerse, y familiarizarse con la Hoja de Ruta de Quebec y sus implicaciones en relación con el Manifiesto. Por la tarde está previsto que se celebre la 57º reunión del Consejo de Administración de la OCPM y en la que sólo están convocados sus miembros. Ya por la noche tendrá lugar en la Mezquita-Catedral la ceremonia de apertura que finalizará con un concierto.

La jornada del miércoles arranca con la apertura oficial del Congreso que dará paso a la Asamblea General en la que se tratarán aspectos administrativos tras la presentación del informe del Presidente de la OCPM. El otro asunto a tratar en dicha asamblea será la presentación de candidaturas para el Consejo de Administración y la ciudad que será la sede del siguiente congreso en 2026. Tras el almuerzo se celebrará una sesión plenaria donde el Panel de Alcaldes presentará los resultados políticos del trabajo colectivo en curso desde 2022. Las audaces orientaciones basadas en la Habitabilidad constituirán el telón de fondo del Simposio y servirán de punto de partida para los debates. La idea principal es que la ciudad es ante todo un lugar para vivir, trabajar, socializar, educarse, hacer comunidad ahí y abrirse a los demás. Tras esta sesión en la que se ha realizado un balance político de la Hoja de Ruta de Quebec tendrán lugar las reuniones regionales.

La agenda prevista para el jueves comienza con el balance técnico en el que a través de una sesión plenaria se van a introducir los diferentes ejes estratégicos para posteriormente celebrarse talleres en paralelo, y divididos en función del eje a tratar, en el que las redes colaborativas presentarán sus resultados. En dichos talleres participarán representantes electos y expertos municipales en función de sus mandatos o competencias, con vistas a validar o desarrollar las conclusiones presentadas por las Redes Colaborativas. También se crearán diferentes mesas de trabajo para priorizar las líneas de actuación. Tras el almuerzo se celebrará el tercer simposio con el protagonismo del Nuevo Proyecto Urbano y la Habitabilidad.

Finalmente el viernes será el momento en el que se presenten las co clusiones que darán lugar a que el Panel de Alcaldes realice una propuesta de las actividades a realizar posteriormente, marcando así el inicio de una nueva fase del proceso que deberá culminar con la adopción del Nuevo Proyecto Urbano en el XVIII Congreso Mundial de la OCPM en 2026 y cuya sede se desvelará en la Asamblea General, reunión en la que también se debatirán las actividades propuestas con el fin de adoptar un plan de acción y el presupuesto para el próximo año. Desde ese momento nacerá la Hoja de Ruta de Córdoba.

Oficios y técnicas tradicionales

La Secretaría Regional de Europa Sur y Mediterráneo (SRESM), en la que Córdoba está presente, se ha centrado en los oficios y técnicas tradicionales para la conservación del patrimonio. Para ello se propusieron varios objetivos como la identificación y consolidación de los profesionales que restauran el patrimonio en sus diversas formas (piedra, metal, vidrio, pintura, etcétera), la difusión y valorización del uso de técnicas tradicionales y el fortalecimiento del mercado para que los emprendimientos que se realicen en estos artes y oficios sean rentables. Las aportaciones de Córdoba para la consecución de estos objetivos grupales han sido la oferta de un curso de construcción tradicional con tierra apisonada, la modificación de la normativa para asegurar que sólo empresas de calidad contrastada puedan intervenir en los conjuntos patrimoniales o, en el caso de la restauración del Alcázar de los Reyes Cristianos, la actualización de los conocimientos tradicionales para garantizar que la restauración cumpliera con los requisitos en materia de accesibilidad universal.