Así es la vida de Ramón Santiago, uno de los asesinos de Sandra Palo

En mayo de 2003 el caso Sandra Palo Bermúdez sobrecogió a la sociedad española. Esta joven malagueña de 22 años y con una discapacidad psíquica leve, era brutalmente asesinada por varios adolescentes que la secuestraron y violaron previamente. Entre los implicados en aquel funesto episodio estaba Ramón Santiago Jiménez, por entonces menor de edad. Casi 20 años después está en libertad, pero con decenas de antecedentes penales en su mochila. Y ha sido entrevistado este fin de semana en el programa televisivo 'Viva la Vida', de Telecinco, algo que ha suscitado infinidad de críticas. Así es la vida de Ramón Santiago, uno de los asesinos de Sandra Palo.

Entrevista a Ramón Santiago Jiménez en Telecinco

Lo que muchos han considerado como un intento de lavado de imagen de Ramón Santiago, acrecentado con la presencia de la madre de la joven española en el plató de televisión, ha terminado plasmando la imagen de un joven de 34 años intentando hacerse la víctima y alejado de los hechos que sucedieron. Violación en grupo, atropelló hasta en quince ocasiones y quemar viva a su víctima con gasolina. Sencillamente aterrador.

La sentencia condenó a tres de los tres acusados. Uno de ellos, el mayor de edad, actualmente está en la cárcel cumpliendo sentencia por los hechos. Los otros dos, que por entonces eran menores, tuvieron una sentencia mucho más leve y ya hace años que están en libertad. Haciendo vida normal. Como Rafael García 'El Rafita', que acumula mRafael García 'El Rafita'ás de veinte detenciones. Y el propio Ramón Santiago, que se ha convertido en un famoso cantante de rap que elabora letras en sus canciones hablando de asesinatos con un tono agresivo.

Tal y como han explicado en Telecinco, un equipo de 'Viva la vida' localizó a Ramón Santiago en un barrio madrileño en el que vive junto a su mujer y su hijo. En la entrevista ha aclarado que el interés por la música le vino cuando estaba en el centro de menores y que en sus canciones plasma también sus vivencias como cuando su padre les abandonó cuando tenía tres años y se tuvieron que encargar de él sus abuelos.

Acumula miles de seguidores en las redes sociales, pero su éxito musical es imposible que tape el fracaso personal que protagonizó en 2003. Por mucho que ahora asegura que se pegaría "tres tiros en la cabeza antes de volver a hacer algo así"o que está "aprendiendo a vivir" con lo que hizo porque se siente "tremendamente arrepentido" y piensa en ello "todos los días".