Viajes y niños: silla homologada y siempre a contramarcha

Durante los meses de verano es mucho más frecuente realizar viajes que conllevan largos desplazamientos en coche.

Por norma general, la sociedad va tomando conciencia de las precauciones que hay que tomar al volante para garantizar la seguridad vial.

Y además, son frecuentes las campañas de la Dirección General de Tráfico que apoyan los consejos y las recomendaciones para tener un viaje de ida y vuelta seguro.

En ese sentido, la DGT ha previsto que durante este verano se van a realizar más de 94 millones de desplazamientos en todo el territorio nacional, por lo que cabe destacar las precauciones que han de tenerse en cuenta a la hora de viajar con pequeños en el interior del vehículo.

Asimismo, la propia delegación de tráfico difunde en una guia donde viene explicada la normativa vigente que se puede consultar aquí.

A contramarcha se reduce el impacto de las lesiones

Es obligatorio instalar un sistema de retención infantil (R.T.I.), homologado y adecuado a la edad del menor siempre que mida hasta 135 centímetros que, al mismo tiempo, debe tener una correcta ubicación en el coche, en cualquiera de los dos asientos traseros, y a contramarcha, dado que el impacto en caso de siniestro, es menor, según los informes de los expertos en seguridad vial.

En el caso contrario, cuando un niño viaja a favor de la marcha puede verse impulsado hacia delante en una colisión frontal, lo que podría generar mayor tensión sobre la frágil zona de la cabeza y el cuello, que podría ocasionar lesiones graves.

Si el niño viaja a contramarcha, la silla reparte las fuerzas por toda la espalda, protegiendo la zona delicada de la cabeza y el cuello.

Los expertos recomiendan prolongar la instalación a contramarcha

De este modo, teniendo en cuenta que el 70% de los accidentes son colisiones frontales, lo más seguro es que los niños viajen a contramarcha hasta que sus músculos y huesos se hayan desarrollado debidamente.

En concreto, la normativa, que será más estricta a partir de septiembre de 2024, dice que el bebé debe viajar obligatoriamente a contramarcha hasta los 15 meses de edad para garantizar una mayor protección, aunque algunos expertos recomiendan que se prolongue incluso hasta entre los 2 y 4 años de edad.

Se trata de una normativa marcada por la Unión Europea, cuya homogologación corresponde a la etiqueta i-Size.

Asimismo, destacan el rol de los padres que deben "asegurarse de conocer las regulaciones locales y las recomendaciones del fabricante, instalando la silla de auto de manera correcta y segura, evitando las distracciones, y comprobando que se cumplen las condiciones de seguridad en todo momento".

Cabe destacar que en Europa, según datos de la DGT, la accidentalidad infantil en carretera sigue siendo preocupante.

Cada año fallecen al menos 1.000 niños y otros 80.000 resultan heridos.

Pero esta situación es mucho más dolorosa si tenemos en cuenta que el 75% de las muertes infantiles y el 90% de los daños graves se podrían haber evitado si los más pequeños hubieran viajado correctamente en el coche, en asientos especiales y con las medidas adecuadas.