La venta de ropa se desplomó en España en 2020 por encima de la media europea

La venta de ropa en España ha sufrido de forma muy dura la pandemia del coronavirus con un descenso del 25 por ciento durante 2020, por encima de la media de la Unión Europea, que fueron de un 21 por ciento. Estos datos han sido recogido por la revista InfoRetail y señalan que España ha tenido porcentajes similares a otros países como Italia, con una bajada del 24 %; Reino Unido, con una disminución del 20 por ciento, o Francia y Alemania, con una caída del 19 por ciento.

El país vecino, Portugal tuvo un descenso más pronunciado de la venta de ropa: un 35 por ciento. Según señala Kantar, la bajada en las compras es porque el casi la mitad de los españoles ha considerado que ahora no tiene que comprar tanta ropa como anteriormente. Se trata, por tanto, de una decisión que se ha visto afectada en los ingresos personales. El gasto medio por comprador ha disminuido de 600 euros en 2019 a 457 en 2020.

Otros datos son que el canal online textil ha tenido un incremento del 55 por ciento en valor y que las ventas en tiendas físicas han bajado un 33 por ciento, según la directora del panel 'Fashion & Beauty' de Kantar Worldpanel, Rosa Pilar López.

Desarrollo de la venta online

Según los datos registrados, España es el país donde la venta online textil se ha incrementado más, por encima de la evolución registrada por el e-commerce de moda de Reino Unido, con una subida del 33 por ciento; Italia, con un ascenso del 29 por ciento; Francia, con una elevación del 24 por ciento, y Alemania, con un aumento del 3 por ciento.

Rosa Pilar López ha explicado que "los grandes cambios en el e-commerce también han provocado movimientos en las empresas de algunos países porque las primeras marcas de pure players de moda a nivel global se han colado entre las firmas más consumidas", y ha añadido que, también, ha ocurrido "con las marcas de retail deportivo, como Decathlon en España, que ha pasado a ocupar el tercer puesto detrás de El Corte Inglés y Zara".

El coronavirus ha dejado un año 2020 en el que, señala López, "ha cambiado por completo la manera de consumir", por lo que ha destacado que "es vital que las marcas se apoyen en los valores que se han desarrollado en el año que hemos dejado para acelerar la recuperación". López apuesta "por el comercio local, la mejora de la experiencia online, la importancia de la salud física y psicológica o la búsqueda de nuevas formas de relación con las marcas, entre otras". Sin duda, una transformación en la idea de la venta de ropa.