¿Cuál es la IP de tu váter?

El váter 'inteligente' de la firma Xiaomi es una realidad. Cuenta con conexión Wi-Fi y reconocimiento personalizado de sus usuarios. Lleva incorporado control de chorros y temperatura a tres niveles ajustables.

Corría el año 1999 cuando cuando el profesor del MIT Kevin Ashton usara por vez primera el concepto del ‘Internet de las cosas’ (Internet of Things -IoT-)de forma pública.

Un año después, la firma coreana LG anunció su nevera conectada, que por entonces sonaba más a extravagancia que a utilidad real. Desde aquella conferencia hasta ahora, el debate y la expectación alrededor del término ha ido creciendo de forma exponencial a sus aplicaciones en la vida real, especialmente en el último lustro.

A los aparatos conectados se suma el váter japonés de la marca Xiaomi. Sí, un váter. En realidad es una taza de inodoro que hace además las funciones de un bidet occidental.

El Smartmi Small Toitet Seat tiene wifi y reconoce al usuario con solo sentarse encima, ajustándose a la configuración de su perfil para emitir chorros a una temperatura u otra gracias a sus tres niveles ajustables. Sus sensores le permiten ajustar la temperatura de la superficie y la presión del chorro.

Además, avisa si el usuario lleva más de 30 minutos sentado. Si la inteligencia falla, esta tapa de inodoro cuenta también cuenta con un panel con botones físicos para regular sus funciones. Para colmo, está fabricado con resina antibacteriana PP con una eficacia antimicrobiana de 99,9%.

El váter de Xiaomi cuesta unos 200 euros, aunque debe comprarse con envío desde China.