Una de cada tres personas infectadas con Covid-19 tiene síntomas neurológicos a largo plazo

Los científicos siguen estudiando al coronavirus y sus efectos sobre las personas y continúan analizando las secuelas que tiene tras haber sufrido la enfermedad. Un estudio publicado en la revista The Lancet ha señalado los trastornos neurológicos sobre una persona que ha tenido covid hasta medio año después de haber pasado la enfermedad y que una de cada tres tiene estos problemas a largo plazo.

Los investigadores han explicado que, tras haber observado una gran cantidad de historias clínicas de pacientes en los 3 meses posteriores al diagnóstico de coronavirus, han contemplado un mayor riesgo de tener ansiedad, trastornos del estado de ánimo y demencia tras haber tenido la enfermedad. Además, hay una incidencia importante de estos trastornos en los pacientes.

Asimismo, el informe ha apuntado a que existen unas primeras estimaciones que son muy significativas porque hay afecciones neurológicas en los seis meses posteriores a haber tenido el covid. A esta conclusión se ha llegado tras haber podido estudiar los registros clínicos de más de doscientos treinta y seis mil pacientes. Había más incidencia de estas situaciones en las personas que habían requerido de hospitalización o ingreso en las unidades de cuidados intensivos.

Encefalopatía

Por otro lado, había encefalopatía, delirio y otras alteraciones de los estados mentales en los pacientes que habían sufrido la enfermedad. El coronavirus produce estas situaciones en los seis meses posteriores al diagnóstico. Existen numerosos casos que se convierten en crónicos y hay posibilidades de demencias, accidentes cardiovasculares y hemorragias en el cerebro. Hay evidencias importantes para aconsejar, según los científicos que han realizado la investigación, que se hagan seguimientos en estos pacientes para no tener problemas futuros en la sociedad con respecto a las enfermedades mentales.

También, hay numerosos problemas posteriores al coronavirus que están relacionados con la frecuencia cardíaca y los pacientes que habían estado ingresados en las unidades de cuidados intensivos e, incluso, habían desarrollado encefalopatía. Hay incidencias que muestran posibilidades de riesgo de accidentes cerebrovasculares tras el covid, por lo que la conclusión ha apuntado a que los servicios médicos deben configurarse de recursos técnicos y humanos para hacer frente a estas necesidades que van a aparecer en pocos meses.

La situación de los pacientes tras haber pasado el coronavirus sigue siendo un enigma para los científicos porque, aunque se va conociendo cada vez más a la enfermedad, existe la posibilidad de que el covid persista o de que aparezcan secuelas muy graves para las personas que lo han pasado. Numerosas unidades de investigación a lo largo de todo el mundo están trabajando en desarrollar líneas de trabajo para tratar sobre los efectos del covid que puede atacar a órganos muy importantes de las personas, tal y como han certificado estos científicos en este trabajo sobre los trastorno neurológicos en los pacientes que han tenido coronavirus.