Ocho palabras únicas que no tienen equivalente en otros idiomas
Sociedad
Cada lengua cuenta con términos para designar situaciones y cosas que no se pueden nombrar en otras
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El español tiene en la actualidad unas 93.000 palabras aceptadas por la RAE, un número similar al hindi pero muy lejos de las 414.000 del inglés.
Si bien establecer esta cifra es complicado debido a que muchas han quedado en desuso y otras muchas no están aceptadas por las academias lingüísticas, sí es evidente es que cada idioma cuenta con palabras únicas para designar situaciones y cosas que no se pueden nombrar en otras lenguas.
La plataforma de idiomas online Preply ha preguntado a algunos de sus profesores por términos que solo existen en sus lenguas originales y que, al traducirse, es imposible resumirlos en menos de una frase. Estos son algunos ejemplos:
- Arigata-meiwaku (japonés): usada cuando alguien hace algo por ti que no quieres realmente que haga pero, al hacerlo, acabas debiéndole un favor y un agradecimiento público. Por ejemplo, cuando esa amiga le da tu número de teléfono al camarero y acaba convirtiéndose en tu novio.
- Cafuné (portugués de Brasil): considerada por muchos una de las palabras más bonitas del portugués, denomina el acto de tocar suavemente el pelo de un ser querido, lo que viene a ser “acariciar”, pero de manera premium.
- Jayus (indonesio): esta palabra podrás usarla a partir de ahora con tu grupo de amigos. Se trata de una broma o chiste tan mal contado y tan malo que cumple su cometido: hacer reír.
- Komorebi (japonés): esta bonita palabra sirve para designar a un momento muy cotizado en películas y videoclips, los destellos de luz que se filtran entre las hojas de los árboles.
- Saudade (portugués): el portugués nos regala otra preciosa palabra muy tatuable. Saudade se refiere a un sentimiento de melancolía o nostalgia por algo que no existe y probablemente no llegue a existir.
- Pana Po’o’ (hawaiano): movimiento innato de rascarse la cabeza con el objetivo de acordarse de algo que hemos olvidado.
- Forelsket (noruego): el amor es sin duda el sentimiento que más palabras genera a su alrededor. Este término escandinavo expresa la euforia sentida en el primer enamoramiento.
- Hyggelig (danés): es una palabra danesa que no tiene traducción directa a otros idiomas, pero que puede describirse como un sentimiento o atmósfera de acogimiento, comodidad, unión y bienestar. “Es un concepto central de la cultura danesa y una parte importante de la identidad danesa. Utilizamos hygge de muchas maneras para describir un sentimiento, una sensación de ser y el ambiente” señala Maya Reeves, tutora de danés en Preply.
Para Sylvia Johnson, directora de Metodología de Preply, estas palabras “son a menudo un reflejo del contexto cultural, histórico o geográfico único de esa lengua. Las distintas culturas tienen conceptos o fenómenos específicos que pueden no tener equivalentes directos en otras lenguas”.
Muchas de ellas designan situaciones universales, pero a las que sin embargo solo una lengua les ha puesto nombre. Contribuyen a una “riqueza lingüística que aumenta la capacidad de transmitir significados sutiles y añade profundidad a la comunicación” añade Johnson.
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