El número 00147, dotado con un millón de euros a la serie

Puede sonar a tópico o a vulgar perogrullada. Pero es un hecho que la lluvia que ayer caló a Vélez de Benaudalla no fue sólo de agua, sino también de millones. Cincuenta son los que Violeta Amate Martín, responsable de la administración número 1 del municipio, repartió del número 00147, que ha resultado agraciado con el segundo premio del sorteo de Navidad. A las puertas de la administración, ubicada en el número 18 de la calle Federico García Lorca, se agolparon durante la mañana de ayer numerosos vecinos, clientes y varios banqueros que celebraron con champán el premio. Violeta, que estuvo rodeada por todos ellos, explicó que ha vendido 55 billetes o, lo que es lo mismo, 550 décimos premiados con 100.000 euros cada uno.

Un total de 28 series del número agraciado fueron distribuidas por Izquierda Unida, otras diez por un vendedor de Ugíjar, que repartió la Lotería por pueblos de la Alpujarra y otras ocho en el bar Medialuna de Calahonda y una vendedora de calle, que podría haberlas llevado al Hospital de Motril. Y eso que el número era "difícil de vender".

Así, la lotera consiguió poco a poco colocar el número "feo" entre algunos clientes. Incluso el pasado martes otro de sus conocidos fue a devolverle tres series del número, si bien Amate trató de convencerlo para que hiciera un último intento por venderlo, de lo contrario dejaría los décimos a primera hora en el buzón de la administración, que en la mañana de ayer estaba vacío. Con empeño, la mujer sólo ha devuelto cinco series del 00147 -cincuenta décimos- y ha logrado repartir suerte entre muchos de los casi 3.000 habitantes de este municipio de Granada, como policías locales, el párroco del pueblo o el presidente local del PP. José Delgado, afiliado y tesorero del Partido Comunista, celebró su acierto a la hora de escoger el número para el partido: "Cogimos 300 décimos para el partido, que no tenía un duro, y vendimos 270".

Aunque la lotera no adquirió ni un sólo décimo del número premiado, ayer no podía ocultar su satisfacción e insistió en una petición: "Ojalá que sepan invertir en su pueblo, que lo gasten aquí. Que levanten negocios y que no se acomoden a un sueldo, a un paro. No se vive con los intereses, sino con el riesgo".

Hasta al párroco de este pueblo agrícola de 3.000 habitantes, ubicado en la comarca de la Costa Tropical de Granada, fue agraciado con 100.000 euros. Lo cierto es que era difícil que no le tocara algún premio, porque Francisco Peinado explica que le compró a todos los vecinos que vendieron lotería, así como papeletas de la comisión de fiestas, de Cáritas... Pero el décimo premiado se lo vendió Paco Martín, concejal de deportes de IU, con el que cambió un décimo, como suele hacer todos los años. "En primer lugar daré un millón de pesetas a Cáritas, a los pobres, a familiares y a hijos de familias necesitadas; siento una enorme alegría porque podré aliviar a familias que conozco y que están muy necesitadas. Yo, gracias a Dios, tengo de sobra para comer, pero es una suerte que esto me haya tocado porque daré mucho", comentó emocionado el párroco.

Y como ni amistad ni lotería distinguen de partidos políticos, también cambió un décimo con un edil de IU Antonio García Delgado, presidente del PP de Vélez. Con los 100.000 euros, asegura que pagará lo que debe, comprará un coche y repartirá entre sus hijos.

Francisco Martín, concejal de IU llevaba un par de décimos y ayer se alegró de su suerte en un momento en el que muchos vecinos se acercan al Ayuntamiento para pedir trabajo. Al respecto, Antonio, que es liberado de IU en el Ayuntamiento, incidió en que el premio ha ido a parar a gente a la que le hace mucha falta: "Está muy repartido y por eso estamos muy contentos. Es un pueblo pequeño, con el trabajo escaseando y por eso va a venir muy bien. Es gente pobre, humilde y trabajadora", aseguró.

Por su parte, la alcaldesa de Vélez, Pilar Péramos, aseguró que una muestra de la delicada situación que viven algunos de los habitantes de la localidad es el hecho que desde hace unos meses el Ayuntamiento repartía cheques de alimentación para aquellos que no recibían ingresos, por lo que confió en que parte de los agraciados se encuentren entre ellos.

A Carmen Sánchez Hidalgo no le gustaba el número del décimo que compró a la mujer de un miembro de IU, al igual que hicieron cinco amigas suyas. La sorpresa se llevó mientras planchaba y, al enterarse, llamó a su madre. "Estoy muy feliz y me alegro especialmente por mis amigas, ya que algunos de sus maridos están en paro. Yo, por fortuna, no tengo esa situación, pero la verdad es que nos viene muy bien este dinero", relató.

Elena Illescas, otra vecina, llevaba un billete a medias con su madre. Se lo vendió, según explicó, una vecina suya, cuyo marido es afiliado a IU. Al escuchar el número, la joven sintió "una sensación muy rara". "Siempre ves la felicidad de la gente cuando toca pero nunca piensas que te va a tocar a ti", explicó. Con el dinero, Elena podrá pasar "unas buenas navidades" y además, dado que su padre "está para jubilarse", el premio será muy recibido. "Me alegro de que le haya tocado a ellos y a gente a la que le hace muchísima falta", valoró.

Otro décimo compartido del número premiado fue adquirido por Miguel Rodríguez Gómez, veleño de 48 años que trabaja en la construcción. Lo compró en el bar del Partido Comunista y le costó ayer creérselo. Precisamente ayer en este bar festejaban por todo lo alto su buena fortuna Francisco Rodríguez Robles, Alejandro Sánchez Robles y Antonio Manuel Bautista Delgado. El primero de los jóvenes explicó que estaba trabajando en una obra cuando escuchó el número por la radio. El veleño, que tenía el número apuntado en un papel, soltó de inmediato el machete, pidió 50 euros y se marchó rápidamente a su pueblo.