La limpieza de la playa es cosa de todos

El Día Internacional de Limpieza de Playas se celebra el tercer sábado de septiembre, con la intención de concienciar a la población sobre la importancia de cuidar el medio ambiente, especialmente el litoral, que sufre una gran cantidad de problemas ambientales debido a las actividades humanas.

El origen de este día tuvo lugar en Estados Unidos en 1986, fue promovido por el Centro de Conservación Marina para evitar la destrucción ecológica de las playas.

El medio ambiente necesita la colaboración ciudadana para la vida en la Tierra pueda seguir tal y como se conoce hasta el momento. Cada vez son más las personas que están concienciadas con la conservación del planeta y luchan activamente por eso.

Uno de los grandes activistas es el modelo y actor, Jon Kortajarena, el bilbaíno se vale de su reconocimiento social y de los millones de seguidores que tiene en Instagram para promover actividades que tengan que ver con el cuidado del medio ambiente.

La más reciente fue en marzo, cuando el modelo convocó una quedada con sus seguidores para limpiar las playas de plásticos. Esa gran lacra que invade océanos y acaba con la vida de muchos animales, además de contaminar el agua. A la convocatoria, en la que por supuesto él acudió, asistieron miles de personas y estuvieron recogiendo plásticos en la playa de Ereaga de la localidad vizcaína de Getxo.

La realidad es que en los grandes océanos ya hay más plástico en suspensión que plancton, y dispersas en la superficie hay numerosas islas gigantescas de plástico. Este material que consumimos en cantidades industriales no se degrada, provocando así un grave impacto en en el medio ambiente.El plástico inunda los mares, playas y la cadena alimentaria marina han sido ya contaminados de manera grave e irreversible.

Estas acciones sirven para que los ciudadanos aúnen fuerzas contra un mal mayor y sirvan de ejemplo para todos los que acuden a las playas y luego no recogen la basura. Sin duda, la limpieza de las playas es primordial porque residuo orgánico o no orgánico que se quede en la arena acaba en el mar. Provocando así la contaminación de las agua y la muerte de miles de peces.