Los jesuitas esperan la "renovación de la Iglesia"

Primeros 'souvenirs' con la fotografía del papa Francisco y anécdotas sobre su vida y obra

C. N. A. / Roma

15 de marzo 2013 - 05:03

Las tiendas de souvenirs exhibían ayer mismo los primeros recuerdos con la fotografía del Papa Francisco. A las doce horas de conocerse la identidad del nuevo pontífice ya se podían adquirir estampas con su imagen y el nombre elegido para su pontificado. Como explicaba el encargado de un comercio de la Vía de la Conziliazzione, se trata de recuperar la pérdida que provocó la inesperada dimisión de Ratzinger.

Se han quedado en el almacén cientos de recuerdos del Papa ya emérito difíciles de colocar en el mercado.

Roma vivió una jornada marcada por la difusión de datos sobre la vida y obra del nuevo Papa: la afección pulmonar que sufrió hace más de 30 años, la relación que tuvo con una chica en su adolescencia, las distintas interpretaciones sobre su posición en los tiempos de la dictadura militar en Argentina, su perfil de hombre políglota (español, italiano, inglés, francés y alemán) y un largo etcétera de cualidades.

La Compañía de Jesús emitió a primera hora un comunicado de felicitación por la elección del primer jesuita como Papa de la Iglesia. El superior general, Adolfo Nicolás, calificó la elección de Bergoglio como el comienzo de una etapa llena de esperanza para la Iglesia: "Todos los jesuitas acompañamos con la oración a este hermano nuestro y le agradecemos su generosidad para aceptar la responsabilidad de guiar a la Iglesia en un momento crucial".

La elección del nombre supone para la compañía de Jesús la identificación del Papa con un "espíritu evangélico de cercanía a los pobres, con el pueblo sencillo", así como su compromiso con la "renovación de la Iglesia", lo que conecta con la inquietud de reformas mostrada por muchos cardenales en los días previos.

El portavoz oficial de la Santa Sede, Federico Lombardi, pertenece a la Compañía de Jesús, por lo que se le pidió que valorara la elección: "Ningún jesuita había imaginado un Papa de los nuestros. Se trata de un jesuita que recibe una llamada para una misión muy particular, con un estilo personal de ejercer como pastor que es muy directo". Restó importancia a los problemas de salud de Bergoglio: "Hace mucho tiempo que le extirparon un pequeño trozo de pulmón. Su capacidad de trabajo no ha disminuido nunca, mucho menos en una diócesis que obliga tanto a estar a pie de calle".

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