El futuro en fertilidad pasa por la donación de embriones

La infertilidad está cobrando un creciente protagonismo en la sociedad actual. El retraso en el inicio de la maternidad hace que cada vez más parejas recurran a Centros de Reproducción Asistida en busca de ayuda o tratamiento para lograr una gestación a término. España es uno de los países europeos con mayor experiencia en técnicas de reproducción asistida.

Como explica el doctor Javier Nadal, director de la Unidad de Reproducción Asistida del Centro Médico Teknon de Barcelona y responsable del Programa de Donación de Óvulos Dona-Dóna, el recurso de la donación de embriones es hoy una de las opciones más contempladas por las mujeres mayores de 40 años. Parejas en lista de espera de adopción, las que llevan años en tratamientos de fertilidad con resultados negativos repetidos y pacientes con abortos de repetición son otras candidatas idóneas.

Nadal ha publicado Donación de embriones,editado con la colaboración de la compañía químico farmacéutica alemana Merck, que supone un análisis en profundiad del alcance y proyección de esta técnica, puesta en marcha en 2004 para dar posibilidad de vida a los embriones congelados conservados en distintos centros españoles. Este método involucra el uso de embriones donados por alguna otra pareja; los cuales serán utilizados para poder lograr un embarazo a través de la transferencia de embriones congelados.

Si adoptar es recibir como hijo al que no lo es biológicamente -con los requerimientos que establecen las leyes-, adoptar embriones supone someterse a un tratamiento con embriones sin destino asignado por sus padres biológicos.

Como en cualquier tipo de donación, la legislación española establece de manera expresa el "total anonimato del proceso" y lo define como "un acto altruista, en el que se renuncia tanto a la remuneración económica como a la posible maternidad-paternidad posterior". Como recuerda Javier Nadal, todas las consideraciones al respecto se proyectan en la realidad biológica del embrión humano. En este sentido, la mayor parte de los expertos en bioética ven en la adopción embrionaria una alternativa mejor que la destrucción embrionaria o la propia investigación con embriones.

Dentro de la medicina pública, el número de embriones congelados en depósito es muy inferior al de los existentes en la medicina privada. Según los datos incluidos en el libro, en España hay unos 3,8 embriones congelados por cada 1.000 habitantes.